El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, inició esta noche la campaña oficial para las elecciones generales del próximo 10 de noviembre dando el pistoletazo de salida «a la campaña de la remontada» con la que su formación acabará «dando la campanada» en las urnas en contra de las encuestas y de «los cenizos».
Ciudadanos eligió Cádiz para el mitin de este viernes y para la tradicional pegada de carteles de la media noche, dando comienzo con ello a la campaña electoral en una ciudad simbólica para un partido constitucionalista «que ama la libertad y que ama a España».
Frente a quienes quieren «que Ciudadanos no esté» en el nuevo escenario político tras las elecciones -«que no exista el centro»- Rivera alertó de que cuanto más fuerte sea su partido «menos chorizos habrá en la Junta de Andalucía, en el gobierno de Madrid o en el Gobierno de España», porque una de sus señas de identidad es la lucha contra la corrupción.
Recordó que en las elecciones autonómicas en Andalucía, ya demostraron «que hay un motor imparable, que es la ilusión», y ya entonces Ciudadanos ganó a las encuestas y a quienes no querían que nada cambiara, y también a quienes creían que era imposible un cambio en la Junta.
Ahora «España está bloqueada», argumentó, y cuantos más escaños tenga Ciudadanos «más fácil será desbloquear este país» porque tanto si ganan como si están en la oposición «también vamos a arrimar el hombro» para sacar adelante las reformas necesarias.
Es hora de que tomen las riendas del país, dijo, «los agraviados» por las políticas del bipartidismo, los «olvidados» por los pactos con los nacionalistas que sólo prestan atención «a quienes gritan» y a quienes «siempre están dando por saco». «Respeto a los independentistas», aseguró en un momento de su discurso, «pero no les voy a permitir tener que cruzar una frontera para venir a ver a mi familia a Andalucía».
Rivera aseguró que si el bipartidismo sale reforzado de las elecciones «no van a cambiar una coma» de la forma de gobernar de los útimos cuarenta años, en los que quienes han mandado de verdad han sido los nacionalistas. La alternativa, apuntó, es «el voto libre» a quienes «nunca pactan con nacionalistas», defienden la libertad y la igualdad de oportunidades de todos los españoles.
Ironizó con la avería en el avión del presidente del Gobierno en funciones, «mucho uso, es lo que pasa», y aseguró después que le da igual dormir en la Moncloa o poder viajar en helicóptero. El pacto de Estado por la educación, igual sanidad para todos, apoyo a los emprendedores y a las familias, «eso sí que me pone».
Rivera cargó contra Sánchez por sugerir que los españoles «se equivocaron» en las elecciones de abril reclamando que ahora voten «más claro», y aseguró que no se equivocaron quienes decidieron que Ciudadanos tuviera 57 escaños. Ahora hay que dejar claro, apuntó, que esos mismos españoles siguen queriendo que sea un partido «decisivo» para la gobernabilidad de España.
Justo después de ese acto, acompañado del vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, Rivera presentó el acto oficial de la campaña, con su imagen caminando en primer plano -la misma de la anterior campaña- y sobreimpreso el lema ‘España en marcha’ con los colores de la bandera.
(SERVIMEDIA)
