Ha sido uno de los casos más mediáticos de los últimos tiempos. Madeleine McCann,una niña de origen británico, desapareció el 3 de mayo de 2007 durante unas vacaciones en Praia da Luz, en el Algarve portugués.
Desde aquel fatídico día, numerosas personas, entre ellos sus propios padres, fueron acusados de su desaparición sin que las autoridades pudieran probar su culpabilidad. Ahora un ciudadano alemán, condenado por el asesinato de tres niños, se ha convertido en el nuevo sospechoso del caso.
Según Scotland Yard, el hombre ya había sido investigado en 2011, pero fue descartado por las autoridades ya que, al parecer, solo atacaba a niños del sexo masculino. Sin embargo, nuevas pistas apuntan en su contra.
Se trata de Martin Nye, de 48 años, que está condenado a cadena perpetua por secuestrar y asesinar a tres niños y abusar sexualmente de 40 más.
Su rastro le coloca en el Algarve portugués, donde estableció su radio de acción en los años 90. Según confesó el arrestado durante su interrogatorio, se vestía de camuflaje, iba armado con cuchillos, acudía a los campamentos de verano y esperaba detrás de los arbustos a que un «niño hermoso pasara», informa ‘The Sun’.
En 1992 acabó con la vida de Stefan Jahr, de 13 años. Tres años después asesinó a Dennis Rostel, de ocho años y es sospechoso de la muerte de Nicky Verstappen, de 11 años, quien desapareció de un campamento de vacaciones en 1998.
Su tercer asesinato probado es el de Dennis Klein, de 9 años, en 2001.