En plena era digital, donde las compras por internet ya son parte de la rutina de muchas personas, una nueva estafa en específico está causando preocupación entre autoridades y expertos en ciberseguridad en España. Se trata de un engaño que utiliza como gancho las entregas de paquetes, los inescrupulosos se hacen pasar por repartidores de empresas conocidas y están afectando a muchos.
Lo que parece una llamada habitual se transforma rápidamente en una amenaza real para la privacidad y seguridad de los ciudadanos. Durante los primeros meses de 2025, esta estrategia fraudulenta ha cobrado fuerza, valiéndose de la confianza que generan las marcas reconocidas para robar información personal, además de tomar el control de cuentas como WhatsApp.
1Una estafa diseñada para parecer normal

A diferencia de otros fraudes que han sido más fáciles de detectar, esta estafa está desarrollada para integrarse perfectamente en nuestra rutina diaria. El método que implementan comienza con una llamada telefónica. Al contestar te encontrarás con una voz amable que se presenta como repartidor de una empresa conocida, ya sea Amazon o Correos, y te asegura estar a punto de entregar un paquete. Muchas veces, las víctimas no recuerdan haber realizado un pedido, pero el estafador insistirá que se trata de un envío pendiente o incluso de un regalo. Para hacer más creíble la historia y ser más envolvente, ya dispone de datos personales como el nombre, dirección o número de teléfono del destinatario.
Desde ese momento, el supuesto repartidor solicita confirmar algunos datos personales como el número de DNI o el código postal. En otros casos, incluso se le propone a la persona enviar un SMS con un supuesto código de seguimiento. Ese mensaje, realmente contiene un código de verificación que los delincuentes utilizan para secuestrar la cuenta de WhatsApp de la víctima. Este es el paso importante: si la persona comparte el código, pierde el control de su cuenta en segundos.
Este engaño es eficaz porque explota una situación que para muchos es absolutamente normal en la actualidad: recibir un paquete. No hay correos mal escritos ni acentos sospechosos; hay una persona detrás de la línea telefónica que aparenta saber quién eres, te trata con educación y te habla de una entrega. Por eso, los expertos están advirtiendo que este tipo de engaños son especialmente peligrosos, porque se muestran bajo una apariencia legítima.