Especial 20 Aniversario

El truco que aprovechan los hackers para abrir cerraduras y robar en los hoteles

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La presencia de hackers o ciberdelincuentes malintencionados plantea la necesidad tanto para usuarios individuales como para empresas de reforzar las medidas de seguridad con el fin de prevenir el robo de información, la suplantación de identidad y otros delitos cibernéticos similares. Tras acumular 30 años de experiencia en el ámbito, un ex hacker ha decidido compartir una serie de consejos para ayudar a las personas comunes a no caer en estas trampas. Sin embargo, lamentablemente, el crecimiento generalizado del uso de la tecnología ha generado que una gran cantidad de dispositivos sean susceptibles de ser hackeados.

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El truco de los hackers para robar en hoteles

Según un informe reciente de Techspot, más de 3 millones de cerraduras de hotel se encuentran vulnerables a un exploit que permite la falsificación de llaves maestras para acceder a cualquier habitación. Este problema afecta a hoteles en hasta 131 países. Aunque el fabricante está trabajando en una solución, no está claro si todos los establecimientos afectados podrán implementarla, ya que implica una actualización tanto tecnológica como económica considerable.

El fallo afecta a las cerraduras electrónicas RFID Saflok fabricadas por Dormakaba. Los hackers pueden clonar la tarjeta de un hotel para acceder a cualquier habitación del edificio, siempre que este utilice software de gestión System 6000, Ambiance o Community. Para aprovechar esta vulnerabilidad, solo se necesita una tarjeta activa o caducada y un dispositivo capaz de escribir datos en ella, como un teléfono Android equipado con NFC.

Una sola tarjeta falsificada puede abrir cualquier puerta del hotel que utilizó la tarjeta original, incluso los cerrojos de seguridad. Además, es difícil identificar si un registro de entrada incorrecto pertenece a un miembro del personal, un cliente legítimo o un hacker. Este problema existe desde 2022 y afecta a 3 millones de cerraduras, pero solo se ha reemplazado el 36% de ellas. La solución es complicada, ya que implica la sustitución de cerraduras, software de gestión, tarjetas, codificadores de tarjetas y dispositivos de terceros integrados, como ascensores, puertas de garaje y sistemas de pago.

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