Si te gusta disfrutar de una buena escapada rural en verano, acercarnos a las cascadas que se sitúan en España son uno de los mejores destinos para refrescarte y disfrutar del agua como siempre has querido este verano.
Por ello, si buscas adentrarte en el campo, recorrer unos cuantos senderos y pasear en busca de un río refrescante, en nuestro país tenemos algunas de las cascadas más espectaculares que puedes encontrar. Son cascadas de agua que se esconden entre los bosques, tan variados como hermosos. Los repasamos.
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Las cascadas en España tienen mucho encanto
Es verdad que ninguna de ellas la podemos comparar a las cataratas del Iguazú, a las cataratas del Niágara o a las cataratas Victoria, está claro, pero aunque parezcan insignificantes ante esas moles de agua todas ellas también tienen su encanto. Además, seguramente las tendrás lo suficientemente cerca como para visitarlas cualquier fin de semana.
Ya sea en Burgos, Álava, Guadalajara, Cantabria, Astruias, Cáceres… en cualquiera de estos destinos encontrarás un salto de agua que merecerá la pena visitar. ¿Quieres conocerlas? Sigue leyendo, las vemos a continuación.
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Las cascadas de Salto de la Poveda, en Guadalajara
En España se pueden encontrar fantásticos rincones naturales gracias al gran número de parques naturales con los que cuenta. En ello también influyen los ríos, que crean riberas, cursos y saltos de agua espectaculares.
Entre ellos, por ejemplo, tenemos cascadas como la de Salto de Poveda, que se sitúa en Guadalajara, muy cerca de Poveda de la Sierra y de Peralejos de las Truchas se encuentra el Parque Natural del Alto Tajo, con este salto de agua maravilloso. Para llegar él es conveniente realizar una ruta senderista circular de aproximadamente 6 kilómetros en la que no solamente se verá la belleza del salto de agua, sino también otros fantásticos paisajes naturales.
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Salto del Nervión, entre Burgos y Álava, entre las cascadas más bellas
Una de estas bellas consecuencias de la escarpada geografía son las cascadas que interrumpen los ríos y provocan atronadoras bandas sonoras. Y, aunque en España somos más de saltos de agua que de espectaculares cataratas, lo cierto es que existen desde caídas de más de 200 metros hasta cuidadosos mantos de agua que hipnotizan con su perfección.
Otra de ellas, y que se hace ver como una de las cascadas más bellas, es la del Salto del Nervión, entre Burgos y Álava. En territorio fronterizo se encuentra esta cascada de más de 220 metros de caída que se precipita desde el Monte Santiago, en Burgos, y cruza la frontera en pleno vuelo para caer en Álava.
Además de esta curiosa demarcación, el Salto del Nervión no es perenne, para observarlo hay que visitarlo en los meses de lluvia y el camino hasta los diversos miradores (tanto en Álava como en Burgos) está colonizado por hayedos que hacen de esta cascada el perfecto colofón de una preciosa excursión.
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Las cascadas del Gollorio, en Guadalajara, una de las más impresionantes: su caída alcanza los 50 metros
Conocida también como la Cascada de Cola de Caballo, la Cascada del Gollorio es un hermoso salto de agua que se encuentra ubicado en el cauce del barranco del Gollorio, un afluente del río Dulce.
Este es nombre que también recibe su arroyo, en la provincia de Guadalajara. Es un salto de agua estacionario, es decir, solo aparece de otoño a primavera, y su caída alcanza los 50 metros. Desde el municipio de Pelegrina se puede hacer una ruta de ida y vuelta en poco más de dos horas. Se encuentra en el Parque Natural del Barranco del Río Dulce, muy cerca de Pelegrina
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Pedrosa de Tobalina, en Burgos: una maravilla natural entre las cascadas más espectaculares
Son numerosas las cascadas y piscinas naturales de las que podemos disfrutar a lo largo de toda la geografía española, pero quizás, una de las más espectaculares es la que se encuentra en la localidad burgalesa de Pedrosa de Tobalina, en la comarca de las Merindades (Burgos).
Se trata de la cascada del Peñón, un salto de agua creado gracias a las aguas del río Jerea que constituye una de las maravillas naturales de esta región.
Esta cascada tiene una altura de más de 20 metros y una piscina natural de unos 100 metros de longitud. Junto a ella se encuentra el mirador de la cascada de la Tobalina, desde donde se pueden disfrutar de las mejores vistas de este monumento de la naturaleza.
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La de Xurbeo, de las caídas de agua más bonitas de Asturias
También tenemos cascadas como la de Xurbeo, una de las caídas de aguas más bonitas de Asturias, la misma que se encuentra en un rincón del valle por el cual pasa el río Negro.
Allí podrás realizar una ruta en la que recorrerás castaños, robles y el precioso bosque de ribera. Un camino espectacular para finalmente descubrir el agua que cae como un manto blanco sobre la piedra negra. Sin duda, esta es una excursión que podrás disfrutar con toda la familia. Además, es un imprescindible a la hora de recorrer el paraíso natural de Asturias.
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El Nacimiento del Río Cuervo, Monumento Natural
En la serranía de Cuenca se encuentran cascadas como la del nacimiento del río Cuervo, considerado Monumento Natural. No es de extrañar viendo el laberinto de manantiales unidos por finos hilos de agua que se crea nada más nacer el río y como se van filtrando hasta unirse para caer desde una multitud de puntos repletos de verde musgo.
La mejor forma de llegar es desde Vega del Codorno, siguiendo el sendero que acompaña al río y que permite contemplar el paisaje en todo su esplendor gracias a un buen número de miradores.
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La caída del Caozo, en Cáceres
En el norte de la provincia de Cáceres se extiende la cascada del fértil valle del Jerte, un paraje bañado por arroyos como el Caozo que, desde las alturas de la Sierra de Gredos, corre primero tranquilo hasta que decide bajar vertiginosamente saltando por las laderas.
A su paso por el valle, el río avanza a base de saltos y cascadas como la del Caozo, cerca de la garganta de Bohonal. Ambos parajes asombran rodeados por un paisaje rocoso y con vegetación de ribera que se pueden contemplar desde diversas plataformas. Más abajo, el río se tranquiliza y riega una zona con campos de cerezos, responsables de que en primavera este rincón cacereño se tiña de colores rosas y blancos.
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Las espectaculares aguas de Gujuli, en Álava
En Álava también tenemos la espectacular cascada de Gujuli, que hace saltar por los aires las aguas del arroyo Oyardo hasta lo más hondo del valle de Ayala, donde a poca distancia se funde con el río Altube.
La caída, de más de 100 metros de altura, se sitúa en el Parque Natural del Gorbeia, muy cerca del pueblo que toma el nombre del río. Este núcleo de población es una síntesis vasca con sus caseríos dispersos entre barrancos rodeados principalmente de robledales y otros arbustos, y con matorrales sobresaliendo de entre las rocas.
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