El presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, ha acusado al lehendakari, Iñigo Urkullu, de «llegar tarde» a la hora de aplicar nuevas medidas tras el repunte de los contagios en Euskadi. En su opinión, las propuestas sanitarias el Gobierno Vasco ante la actual situación son «fruto de la improvisación» y llegan cuando ya es la comunidad autónoma con los «peores» datos.
El líder de los populares vascos se ha referido en estos términos en una rueda de prensa en la sede del PP en Bilbao, donde ha repasado temas de la actualidad vasca como las negociaciones sobre los Presupuestos Vascos o la situación de la pandemia en la comunidad autóma.
En este sentido, Iturgaiz ha acusado al Ejecutivo de, con las nuevas medidas aprobadas, hacer pagar a «justos por pecadores y que los irresponsables encierren a los ciudadanos responsables que se vacunan y toman precauciones».
También, ha añadido, el Gobierno Vasco ha puesto la «diana» en la hostelería, ha remarcado, porque ha vuelto a señalar de forma «lamentable» a ese sector a la hora de fijar restricciones, cuando los hosteleros «están hartos de ser siempre los paganos de esta situación en Euskadi».
Toda esta respuesta, desde su perspectiva, parece, «una vez más, fruto de la improvisación porque siempre llegamos los últimos pero, mientras tanto, a Urkullu no se les escucha ninguna autocrítica» ha lamentado.
En ese sentido, ha criticado que el lehendakari pida ahora «sopitas» a su socio en el Gobierno de Madrid, Pedro Sánchez, y le «implore» actuaciones cuando Euskadi ya está con los peores datos.
En este punto ha apuntado que, otras comunidades autónomas, como Galicia, han tomado ya iniciativas mucho antes que nosotros sin tener los datos tan malos y, además, contando con seguridad jurídica», ha recalcado.
Iturgaiz ha afirmado entender que cualquier tipo de medidas en el sentido restrictivo, para que sean efectivas, deben tomarse siempre con «el paraguas de la seguridad jurídica», pero es que eso, otros, ya lo pidieron.
Mientras, ha proseguido, desde el gobierno, en Euskadi, «sólo se acuerdan de Santa Bárbara cuando truena y Urkullu nos viene ahora a instar a Madrid, cuando es él el que llega el último y con los peores datos». «No le he oído hacer autocrítica en este tema y siempre está echando la culpa a los demás».
En esa misma dirección, en la de repartir «culpas», Iturgaiz ha encuadrado las recientes referencias del lehendakari al «dumping fiscal» de la Comunidad de Madrid y a la defensa de su régimen fiscal por parte de los empresarios vascos, por entender que la comunidad madrileña ofrece mejores condiciones fiscales para la actividad empresarial actualmente que Euskadi.
En opinión de Iturgaiz, las valoraciones tanto a la Comunidad de Madrid, como a su presidenta o a la postura de los empresarios vascos en este debate fiscal son un ataque «gratuito» que se le ha vuelto «completamente en contra» a Urkullu, porque se ha demostrado que el concierto económico en manos de este Gobierno Vasco ahuyenta la inversión en vez de atraerla.
También sirve el concierto vasco, ha añadido, «para usarlo como castigo fiscal y subir impuestos a familias y que los empresarios tengan peores condiciones fiscales que otras comunidades que, por cierto no tienen un concierto propio», ha apuntado.
Desde su perspectiva, el lehendakari en esta polémica fiscal se ha metido en «un jardín laberíntico, atacando a los empresarios vascos, del que no sabe ahora cómo salir». Mejor haría, ha apostillado, «no buscando los enemigos fuera y haría mejor en ayudar a esos empresarios vascos a acceder a ayudas para crear empleo y tejer la economía vasca».
