Cs insta a Marlaska a dimitir tras el «varapalo» de una juez de Ceuta a la repatriación de menores

El vicesecretario general y portavoz del Comité Ejecutivo de Ciudadanos, Edmundo Bal, ha exigido la dimisión del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, tras la decisión de una juez de Ceuta de mantener suspendida la repatriación de nueve menores marroquíes a su país de origen y rechazar las razones esgrimidas por el Gobierno.

«La Justicia tumba los argumentos del Gobierno para tapar su negligencia en las repatriaciones de menores en Ceuta. No hay excusas. Marlaska debe dimitir tras este doble varapalo: ni hay excepción para saltarse trámites, ni es competencia del Gobierno ceutí», ha escrito Bal en un mensaje en su cuenta de Twitter.

La formación naranja ha solicitado en el Congreso la comparecencia tanto del responsable de Interior como de la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, para que expliquen las «decisiones de dudosa legalidad» que ha tomado el Ejecutivo del PSOE y Unidas Podemos en lo relativo a la devolución de menores no acompañados desde Ceuta a Marruecos.

La titular del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Ceuta ha ordenado este martes prolongar la suspensión judicial del traslado de nueve menores migrantes a Marruecos por la vía expeditiva elegida por el Ministerio de Interior, al margen de lo previsto en la legislación española y los tratados internacionales, una suspensión que, por extensión, ha paralizado todo el proceso de repatriaciones.

Según el auto firmado por la juez, «existen datos bastantes para entender que se podría haber producido una vulneración del derecho a la tutela judicial efectiva» de estos niños y adolescentes en caso de devolución.

Además, rechaza las alegaciones de la Abogacía del Estado, dejando claro que la competencia en este caso es de la Delegación del Gobierno en Ceuta, no del Ejecutivo de la ciudad, y que el acuerdo suscrito en 2007 por España y Marruecos en el que se basa el Ministerio para defender las repatriaciones es solo «una declaración de intenciones» y, en cualquier caso, su propio articulado obliga al Gobierno español a acatar la legislación nacional e internacional, «concretamente, la Convención sobre los Derechos del Niño».

Bal ya dijo este lunes que, en caso de que la decisión judicial fuera desfavorable al Gobierno de Pedro Sánchez, Grande-Marlaska tendría que dejar su cargo, porque ha acumulado «innumerables desaciertos» desde el comienzo de su mandato y este asunto de los menores marroquíes es «la gota que colma el vaso».

Afirmó que, en la devolución de los menores marroquíes que cruzaron masivamente la frontera de forma irregular el pasado mayo, se estaban infringiendo los procedimientos administrativos y criticó al ministro por intentar «quitarse el problema de en medio echándole la culpa» al Ejecutivo ceutí y por su explicación «absolutamente peregrina» sobre el acuerdo bilateral con Rabat.