El 10 de julio de 1997 se apagaron las luces de ‘Esta noche cruzamos el Mississippi’ pero, ¿qué queda de aquel mítico programa? El espacio presentado por Pepe Navarro, rescatado del olvido en ‘Veneno’, serie producida por Atresmedia, fue el primer ‘late night’ de la historia de la televisión privada nacional. Maravillados por el novedoso formato, eran millones los españoles que se sentaban cada madrugada delante del televisor.
Entrevistas, música, variedades, humor y mucho surrealismo cabían en este atrevido espacio. El ‘Mississippi’ tenía claras influencias de los ‘lates’ norteamericanos, pero a la vez guardaba un estilo personal muy característico. Hasta el momento no se había visto nada así en la televisión, mucho menos en la de este país.
A pesar de haber estado tan solo dos temporadas en pantalla, su influencia en el panorama televisivo nacional es enorme. A rebufo del programa de Pepe Navarro, que acabó abruptamente por una polémica que después explicaremos, nació entre otros ‘Crónicas Marcianas’. Desde entonces han sido muchos los que han seguido el curso inicialmente trazado por el ‘Mississippi’.
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PEPE NAVARRO, ÚNICO Y NECESARIO
Aunque gran parte del éxito de ‘Esta noche cruzamos el Mississippi’ se sustentara en el carisma de los colaboradores, la figura de Pepe Navarro fue esencial para alcanzarlo. El presentador, admirador del formato ‘late night’, anduvo detrás de las cadenas privadas para obtener un espacio y lo consiguió.
En 1995 Telecinco le da carta blanca para que se invente un programa en una franja horaria que no quería nadie. Lo más parecido que había era el magazine nocturno del Gran Wyoming en Telemadrid.
La imagen de Pepe Navarro, taza de ¿café? en mano, dando paso a un sinfín de disparatados personajes, es historia de la tv. Tenía una manera muy peculiar de desenvolverse sobre el escenario, y su profunda voz llegaba sin complicaciones a todos los rincones de los salones españoles.
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EL INOLVIDABLE DECORADO DEL ‘MISSISSIPPI’
Había un poco de todo, como en botica. Ya de primeras, y al observar el ‘skyline’ de fondo, intuíamos que Navarro quería transmitir con él esa imagen de cosmopolitismo y nocturnidad que pretendía que tuviese el ‘Mississippi’. Aunque el pasado septiembre se cumplieran 25 años del estreno del ‘show’, el espacio o la estética podrían seguir teniendo hueco en la ‘tele’ actual.
Sobre la mesa, la típica mesa amplia de entrevistador, siempre estaban -aparte de los papeles de Pepe- la mítica taza y un micrófono de pie, de esos antiguos de radio. Encima de este, casi recostado encima, iba lanzando Navarro los contenidos. El modelo funcionaba, puesto que nadie en España ha sabido replicar el éxito en audiencias de ‘Esta noche cruzamos el Mississippi’. Ni siquiera ‘Crónicas Marcianas’.
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ENTREVISTAS Y DEBATES
Aunque la gente conectaba con ‘Esta noche cruzamos el Mississippi’, en gran parte, por lo histriónico de sus personajes y sus ‘sketches’ humorísticos, también había espacio para el periodismo. Políticos, cantantes, actores y demás personajes de la farándula patria se sentaron en el mítico plató a charlar con Pepe, que regularmente también adelantaba noticias, normalmente relacionadas con sucesos.
Famosos de la época como Jesulín de Ubrique, Marta Sánchez, Terenci Moix, Emilio Aragón o Victoria Abril pasaron por el programa para ser entrevistados. Como el tono comunicativo del propio ‘Mississippi’, que pasaba rápidamente del rosa al negro, y de ahí al amarillo, eran las entrevistas guiadas por Pepe Navarro. Información, sí, pero siempre con un punto picante y canalla. El presentador sabía que la gente demandaba espectáculo.
Otro punto fuerte eran los debates, en los que participaban desde grandes expertos hasta personajes salidos aún no sabemos de qué perdido inframundo. Este fue otro de los éxitos del programa: el haber conseguido crear un caldo de cultivo heterogéneo donde personalidades de distinto pelaje y comportamiento pudieran tener un hueco común.
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LOS PERSONAJES INOLVIDABLES QUE CRUZARON EL ‘MISSISSIPPI’
Si eres de la generación ‘zeta’ y apenas conoces ‘Esta noche cruzamos el Mississippi’ de haberlo visto en la serie ‘Veneno’ de Los Javis, tú te lo has perdido. Aparte de haber sacado a Cristina García del barro para llevarla a la televisión, Pepe Navarro supo extraer su mejor jugo a una serie de personajes inolvidables que, cada uno en su estilo, conformaban una surrealista cuadrilla que mantenía a los espectadores pegados a la pantalla.
Del Mississippi también salieron tremendos animales televisivos. Uno de los más recordados era Florentino Fernández, que debutó en este ‘show’ con gran éxito gracias principalmente a dos personajes que interpretaba: Lucas Grijander y Crispín Klander. Carlos Iglesias, que más tarde se populizaría aún más haciendo de Benito en ‘Manos a la obra’, se hacía pasar por ‘Pepelu’, un supuesto hijo secreto de Pepe Navarro, levantando amplias carcajadas entre el respetable.
Otras apariciones muy esperadas eran las de Sonia Monroy, explosiva gogó que mostraba su silueta tras una cortina, las de Doña Reme, encarnada por la actriz Maribel Ripoll, o las de Santiago Urrialde, que hizo que toda España imitase a Rambo diciendo aquello de «¡No me siento las piernas!» o «¡Que vienen los charlis!». El éxito de la Veneno, una prostituta transexual sin pelos en la lengua, fue una especie de guinda a un pastel de muchos pisos y muy diferentes sabores.
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TELECINCO NO AGUANTÓ TANTA POLÉMICA
Pepe Navarro sabía bien dónde meter el dedo, y ‘Esta noche cruzamos el Mississippi’ siempre jugó con el estrecho margen entre lo espectacular y lo permisible. Al menos mientras pudo. La polémica de los contenidos iba a más a medida que pasaban las semanas. Sexo, drogas, delincuencia… Todo lo que pudiera alimentar el morbo era susceptible de pasar por el programa.
Uno de los hitos más criticados de la trayectoria del programa fue el amarillista seguimiento del crimen de las niñas de Alcasser. La trama se convirtió en una sección fija del ‘late night’, y por ella pasaban desde familiares hasta supuestos testigos del caso y especialistas. Hubo acusaciones, se dijeron nombres, pero no se dieron pruebas y hubo varias denuncias de los afectados.
Todo esto minó la paciencia de Telecinco, que cansada de apagar fuegos decidió sustituir a Pepe Navarro por Xavier Sardá, cancelar el Mississippi y comenzar una nueva era televisiva, la de ‘Crónicas Marcianas’.
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¿DÓNDE DESEMBOCÓ EL MISSISSIPPI?
La historia de ‘Esta noche cruzamos el Mississippi’ terminó abruptamente, pero la de su secuela aún más, y en una historia cargada de polémica. Cuando Telecinco decidió clausurar el programa que tanto éxito le había dado apareció Antena 3, que le ofreció un espacio a Pepe Navarro: ‘La Sonrisa del Pelícano’. Este se llevaría al ‘show’, entre otros, a Florentino Fernández, a la ‘Veneno’, a la periodista del corazón Idoia Bilbao o a un jovencísimo Miki Nadal.
Para pelear con la audiencia que le robaba Sardá, el nuevo programa de Pepe Navarro fue volviéndose cada vez más polémico y sensacionalista. Le encantaban las polémicas de peso que estuvieran relacionadas con personas poderosas, como el Caso Arny o el Caso GAL. Esto, lógicamente, le granjeaba a Navarro y a la propia cadena enemigos muy peligrosos.
Después de reventar hasta la saciedad el secuestro de la farmaceútica de Olot o de provocar una protesta de la Casa Real por ciertos comentarios acerca del sexo prematrimonial de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarín, dio con un hueso duro de roer: Pedro J. Ramírez.
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ADIÓS PARA SIEMPRE POR ‘TOCAR LAS NARICES’ AL PERSONAJE EQUIVOCADO
‘La sonrisa del Pelícano’ fue cancelado de un día para otro, sin previo aviso, con Antena 3 argumentando que vulneraba el Código Deontológico de la cadena. Varias personas, entre ellas el político Joaquín Leguina del PSOE, afirmaron que la decisión se debía a que Navarro estaba convencido en sacar esa misma noche un vídeo de alto contenido sexual del actual editor de El Español y exdirector de El Mundo.
Cuando echaron a Pepe Navarro y a todo su equipo ‘Crónicas Marcianas’ ya les había superado en el ‘share’. Quizá desde dentro del programa no fueron capaces de darse cuenta de que todo en exceso es malo, y que quizás se le había ido el gusto por el morbo de las manos. Navarro lo pagó con años de ostracismo mediático, pero las rentas que había recogido eran amplias.
Y es que estamos hablando de uno de los programas más rentables, también uno de los más legendarios, de la historia de la televisión española. Todo esto es lo que te perdiste si no pudiste ver ‘Esta noche cruzamos el Mississippi’.
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