Muchas veces al observar a una persona comerse las uñas lo relacionamos con nerviosismo o estrés; pero se ha determinado que la razón no necesariamente sea por angustia, ya que muchos lo hacen cuando tienen hambre o están aburridos.
Se estima que entre un 20% y 30% de las personas de todas las edades, se comen las uñas, es un mal hábito que puede traer consecuencias para la salud integral de la persona afectada.
¿Qué es la onicofagia?
Según la Asociación Americana de Psiquiatría es un trastorno obsesivo-compulsivo, en la que el paciente se come o muerde las uñas, este hábito usualmente ocasiona daños en las uñas y dedos así como una serie de problemas dentales.
También puede ser una puerta de entrada para todo tipo de bacterias como la E.coli. Entre otras, pudiendo ocasionar vómitos y diarrea y numerosos problemas gastrointestinales.
Causas de la onicofagia

El morderse las uñas puede tener un efecto calmante para las personas que no pueden gestionar sus emociones y emplean esta conducta obsesivo-compulsiva, para obtener una sensación de calma.
Hay algunas situaciones que pueden generar emociones desencadenantes tales como:
- Estrés: Ante situaciones estresantes muchas personas se muerden las uñas, como un mecanismo de escape.
- Timidez o baja autoestima: Cuando la persona tiene sensaciones de menosprecio o frustración, aunque también se puede presentar en personas con altos niveles de exigencia y perfeccionistas.
- Miedo: Algunas personas comienzan a comerse las uñas ante situaciones de miedo o angustiantes.
Daños que ocasiona el morderse las uñas
El morderse las uñas como un hábito puede ocasionarte muchos problemas de salud, ya que te estarías afectando en el nivel psicológico, el físico y el social; lo que conlleva al agravamiento de la situación.
Por eso si el problema es persistente y está causando graves lesiones en las manos y dientes, debes buscar ayuda profesional que te ayude a gestionar las causas de este tipo de trastorno obsesivo-compulsivo.
Lesiones en las manos por comerte las uñas

El hecho de morderse las uñas ocasiona un problema estético entre las uñas y los dedos y como consecuencia de las lesiones constantes recibidas en las uñas; se crean micro traumatismos que no permiten un crecimiento normal.
Estas lesiones generalmente es acompañada de sangrado, inflamación de la piel de los bordes de la uña ocasionando dolor. Estas lesiones favorecen la aparición de hogos en las uñas y en el debilitamiento de la misma por lo que altera su tasa de crecimiento en un 30% por debajo de lo normal.
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Lesiones dentales y de la mucosa bucal

El hábito de morderse las uñas ocasiona una gran cantidad de problemas bucales y dentales; generalmente provoca lesiones en las encías y el paladar provocando aftas, herpes y gingivitis; esto puede incluir infecciones bucales mucho más graves como la estomatitis.
En los dientes produce daños en el esmalte lo que ocasionará una hipersensibilidad dental e incluso puede producir pequeñas fracturas en los dientes; también puede dañar algún tratamiento de restauración dental que se haya realizado y producir un fuerte dolor en la pieza dental afectada.
Daño psicológico

El hábito de comerse o morderse las uñas es conocido como onicofagia; y es un trastorno obsesivo-compulsivo por lo que va a requerir de psicoterapia para sanar y eliminar este hábito que causa muchos problemas de salud.
Por lo que requerirá de una terapia de reversión de hábitos; terapia de reprocesamiento y desensibilización a través del movimiento ocular, terapia cognitivo conductual entre otros métodos psicológicos.
Terapia de reversión de hábitos

Es una terapia muy eficaz en la eliminación de conductas repetitivas dañinas; esta técnica se adapta a cualquier edad y condición socioeconómica, consta de 5 fases:
- Toma de conciencia: En esta fase se busca que la persona afectada; se haga consciente de cuando y porque realiza el hábito y que lo desencadena.
- Entrenamiento en relajación: Por lo general este tipo de hábito es más frecuente cuando la persona está estresada o angustiada; por lo que se le entrena en técnicas de relajación para que las ponga en práctica ante una situación que le genere tensiones.
- Entrenamiento para cambiar la respuesta del hábito: Se entrena a la persona para que en el momento de sentir la necesidad de comerse las uñas, realice otra actividad que demore varios minutos para impedir realizar el mal habito.
- Motivación: La motivación por parte de su familia es fundamental sobre todo en personas con baja autoestima.
- Entrenamiento a través de la visualización: El paciente debe realizar ejercicios de visualización donde recrea las situaciones que le producen el hábito, para saber como debe controlarlo
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La Terapia de reprocesamiento y desensibilización a través del movimiento ocular

Con este abordaje terapéutico se busca sanar traumas que pueden estar en el subconsciente y ha creado una huella emocional. Esta terapia se basa en el recuerdo de experiencias traumáticas que pueden desarrollar el trastorno que aqueja al paciente.
Consiste en que el paciente va recordando algún evento traumático vivido a la vez que el terapeuta realiza una estimulación visual de manera bilateral, es decir mueve su dedo de izquierda a derecha y el paciente lo sigue con los ojos. Este proceso estimula el sistema de procesamiento adaptativo de la información.
Terapia cognitiva conductual
Es una terapia psicológica donde puedes expresar tus ideas negativas con el psicoterapeuta y te ayuden a tomar conciencia de como gestionar tu respuesta de forma positiva en diferentes situaciones.
Es una terapia que te proporciona herramientas muy útiles para que puedas manejar de una forma muy serena cualquier situación que puede desencadenar el hábito de morderse las uñas.
Beneficio de morderse las uñas

En la Universidad McMaster en Australia se llevó a cabo un estudio donde se determinó que el contacto a temprana edad con ambientes poco higiénicos reducía la probabilidad de desarrollar alergias; también descubrieron que las personas que regularmente tienen el hábito de comerse las uñas tenían un sistema inmunológico más fuerte.
Según el Dr. Malcolm Sears, profesor de medicina de dicha Universidad y titular de dicho estudio considera que masticar las uñas con todas las bacterias y gérmenes contenidas, son una especie de vacuna natural que ayuda al sistema inmune a ser más fuerte. Aunque aclaró que no es su intención fomentar este tipo de hábitos.





































































































































































