Los compromisos institucionales comenzaron hace unos días, oficialmente, pero antes de sumergirse en una semana cargada de protocolo, Felipe VI decidió tomarse un respiro. Durante el fin de semana, su presencia en un conocido hotel de Úbeda, Jaén, causó sorpresa entre invitados y curiosos. Acudía a un encuentro privado que no tiene nada que ver con reuniones familiares o institucionales.
El paso de Felipe VI por Úbeda no estaba programado ni formaba parte de su agenda oficial de la semana, pero su sola aparición en el Hotel Ciudad de Úbeda generó sorpresa entre quienes asistían a la boda de Cristina Ponce y Pablo Urueta. El rey, que acudía en realidad a una comida privada, se dejó fotografiar y mostró una imagen más cercana y desenfadada de lo habitual.
1Felipe VI disfruta de un plan privado en Jaén

El sábado, Felipe VI apareció en el Hotel Ciudad de Úbeda, el mismo lugar donde se celebraba la boda de Cristina Ponce, hija de la marquesa de la Rambla, y Pablo Urueta. Los invitados a la ceremonia se sorprendieron al ver al monarca paseando por los jardines del establecimiento, conversando con quienes se le acercaban e incluso posando para fotografías improvisadas.
Según adelantó la revista Lecturas, la confusión se estableció en el lugar. El nombre del jefe del Estado no estaba en la lista de invitados, lo que generó todo tipo de especulaciones. Muchos pensaron que asistía de forma discreta al enlace, aunque después se aclaró que su presencia no tenía que ver con la boda. El monarca había elegido ese hotel para un encuentro privado con antiguos compañeros de promoción militar.