La noche del 17 de mayo quedará grabada en la memoria de los españoles como un nuevo episodio de decepción en Eurovisión. Melody, que llegó al festival con el tema viral ‘Esa diva’, logró un vago puesto entre 26 participantes, sumando un total de 37 puntos.
Un resultado que empeora el ya discreto lugar número 22 de Nebulossa el año pasado y aviva el debate sobre replantear la participación de España en Eurovisión. Las redes sociales explotaron minutos después de conocerse la clasificación, con críticas contundentes a la organización, al método de votación y, sobre todo, a la sensación de qué es lo que realmente pide Europa para ganar el certamen.
1La cruda realidad de un resultado injusto a Melody
A pesar de las dudas iniciales, Melody llegó a Eurovisión con el respaldo de sus fans y una actuación sólida que, en teoría, parecía tener todo lo necesario para destacar: coreografía conceptualizada, un tema contagioso viral y una puesta en escena invadida por la energía.
Sin embargo, Melody no convenció al jurado internacional. Con solo 27 puntos de los jueces —y 10 pobres puntos del televoto—, España quedó relegada al antepenúltimo puesto. Lo más irritante para el público español y seguidores mundiales de Melody fue ver cómo, después de unos primeros votos esperanzadores para la sevillana, las presentadoras de Eurovisión dejaron de mencionarla.
Los espectadores de Televisión Española y de muchos otros países, sobre todo de América Latina, que apoyaban a la cantante, no tardaron en reaccionar. «No merecía ni esa posición ni esos puntos. Su actuación estaba muy por encima de muchísimos países», escribió un usuario en X, resumiendo la indignación general. Otros cuestionaron la falta de coherencia entre la calidad del evento y el resultado final: «Si esto no es suficiente, ¿qué tenemos que hacer? ¿Llevar un coro de 100 personas y fuegos artificiales en cada segundo?», señaló otro seguidor.
