Parecería que limpiar puertas de madera no es algo para lo que se deba tener una maestría en algún tipo de estudio, que es una actividad sencilla, sin muchos inconvenientes, pero no es tan sencillo como parece, de hecho, hasta tiene sus trucos.
Las puertas de madera las encontramos en todos lados, en los hogares, en las oficinas, en las tiendas o establecimientos, por ello, se trata de un implemento que usamos a diario, pero, ¿Cuándo fue la última vez que las limpiaste? ¿Sabes acaso cómo deben limpiarse correctamente? Con eso queremos ayudarte en este artículo.
3Al llegar el momento de la limpieza

Vamos a ser honestos, cuando limpiamos la casa, las puertas siempre se nos olvidan. Y si por casualidad, nos acordamos de ellas, las limpiamos mal, cometiendo errores que son bastante comunes, entre los cuales se encuentran:
- Abusar del plumero. No es bueno ni higiénico usar el plumero como el único artículo para limpiarlas, ya que un plumero normalmente lo que hará será esparcir el polvo, en vez de limpiar.
- Empezar a limpiar la casa por las puertas. Este es un error clásico, porque si empezamos por limpiar las puertas, cuando nos pongamos a limpiar el resto de la casa, el polvo, los gérmenes y los ácaros que se encuentran en el suelo, en los muebles o en las estanterías se depositarán nuevamente sobre la superficie de la puerta.
- Siempre nos olvidamos de los marcos, los pomos y las manillas. Y en realidad son lo más importante, porque es lo que más tocamos y allí se depositan toda clase de gérmenes y de bacterias.
- Si usamos un producto líquido no las secamos después. La humedad no es amiga de la madera, porque puede perder su brillo, se puede estropear y agrietar.
¿Cuántos de estos errores cometes tú? Pues y es tiempo de que aprendas el modo correcto de limpiar las puertas de madera y te lo vamos a explicar.