Cárcel, drogas y muertes: la cara oscura de Gran Hermano

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Más de 500 personas han entrado a la casa de Gran Hermano durante sus 18 ediciones de anónimos. La vida de todos los participantes en el reality se ha visto marcada por salir en la televisión. Muchos han conseguido fama y dinero fácil, pero otros han visto la cara oculta de la popularidad.

Los espectadores hemos sido partícipes de todo lo que les ocurre a los concursantes de Gran Hermano al salir del reality. Por este motivo, vamos a recordar la cara menos bonita de Gran Hermano (cárcel, drogas, muertes…).

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LA ADICCIÓN AL JUEGO DE IGOR BASURKO (GH 14)

Foto: Mediaset

Igor Basurko era un jugador profesional de hockey de San Sebastián cuando concursó en Gran Hermano 14. El joven pasó 110 días en la casa y consiguió ser el segundo finalista. Igor fue repescado pero se quedó a las puertas de hacerse con el maletín, que cayó en manos de Susana Molina.

El vasco tuvo una relación muy polémica con Miriam dentro de la casa. Pero lo que más daría que hablar años después fue su ludopatía. Igor se gastó todo el dinero que había ganado gracias a su popularidad en el juego e incluso llegó a ligar con mujeres para robarles su tarjeta de crédito. Esto le llevó a ser detenido por un delito de robo y estafa, lo que le hizo darse cuenta de su problema para comenzar a rehabilitarse.