martes, 7 mayo 2024 17:16

Daniella Semaan, la mujer de Cesc Fábregas que enseña sus encantos a todos en Instagram

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En ocasiones, varias de las Wags más hermosas de los futbolistas españoles no han nacido en este territorio y el de Daniella Semaan es uno de los casos más representativos. La esposa de Cesc Fábregas viene de la exótica tierra del Líbano y como modelo profesional ha tenido la posibilidad de conocer muchos lugares; pero en cada uno de ellos ha destacado por su deslumbrante belleza. Aunque ha expuesto sus encantos en distintos países gracias a su profesión y los lugares donde ha jugado su marido; la verdad es que en España dejó una huella increíble que aún hoy no se ha podido borrar.

Otras Wags espectaculares como Antonella Roccuzzo, Coral Simanovich o Shakira, son ejemplos claros que la belleza puede venir desde cualquier parte del mundo; pero está claro que la que expresa Daniella Semaan es más que especial, porque logra que todos a su alrededor queden paralizados solo para admirarla. Tantos años como modelo le han creado una buena fama y su paso por España e Inglaterra le han dejado una gran cantidad de admiradores; ahora radicada en Mónaco, pues allí juega Cesc Fábragas, deslumbra a todos con su hermosura en esta tierra de lujos y encantos. Sus posados en Instagram tienen un toque espectacular, pero no cabe duda de que es ella la que termina de poner esa magia que hace falta.

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Esa belleza que enamora de Daniella Semaan

Al observar a Daniella Semaan se entiende casi de inmediato como Cesc Fábregas cayó rendido a sus pies y eso tiene que ver mucho con su espectacular belleza. Claro que el futbolista del Mónaco debe conocer muchos aspectos de su personalidad bastante atractivos; no obstante, a primera vista lo primero que seduce es su hermoso rostro. Muchos se irían con esa figura escultural que tiene, que realmente si que puede ocasionarle un infarto a cualquiera; pero todos caen rendidos a sus pies al verla con esas facciones que no dejan hacer otra cosa que admirarla. Aquí sorprende con una foto en la que no muestra mucho su cuerpo y aunque ese escotazo se lleva bastantes miradas, sus bellos ojos y esa sonrisa son las que iluminan una instantánea de postal.