La salsa casera que muchos estamos acostumbrados a comer se realiza con recetas que han pasado de nuestras abuelas a nuestras madres; y para nosotros generalmente son las mejores; así que te diremos cómo hacer una salsa de tomate frito paso a paso con ese sabor propio de nuestras abuelas, que hemos logrado investigar, por lo que te garantizamos que la harás de verdad.
La ventaja de una buena salsa de tomate frito es que, además de deliciosa es fresca y natural, ya que la hacemos a partir de tomates frescos y la consumimos en el momento, tal vez uno o dos días guardada si sobra y la puedes hacer en la Thermomix; aunque hay quienes las hacen para tenerla disponible por un buen tiempo; y nos sirve para acompañar pastas, pizzas, carnes y pollo, y hasta sola con un buen pedazo de pan.
3El líquido para la cocción
El jugo que debe llevar el tomate para freírse debe ser el que él mismo expulse; por eso te recomendamos que, si estás utilizando un tipo de tomate muy jugoso, al pelarlo y trocearlo no botes ese líquido, utilízalo para la cocción; así, por ejemplo, los tomates peritas sueltan su propio jugo y con eso es suficiente.
Un tomate normalmente suelta las tres cuartas partes de su peso en jugo y al triturarlo soltará mucho, lo que es suficiente para cocerlo frito luego; y al ser su propia pulpa, o tardará en volverse espeso rápidamente; ahora bien, si se compran envasados enteros y pelados, hay que desechar el líquido en el que vienen.
