Grandes frases de Pau Donés que deberías interiorizar para siempre

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El pasado domingo se emitió Eso que tú me das, la última charla con Pau Donés, y en ella nos dejó frases que deberías interiorizar para siempre. Este documental se grabó en mayo del pasado 2020 y se estrenó en el Festival de Cine de Málaga para luego llegar a 280 cines del país y convertirse en el documental más visto en el cine en los últimos diez años. Como decíamos, el pasado domingo llegó a nuestras televisiones al estrenarse en abierto en La Sexta. La charla de Pau Donés con su amigo Jordi Évole, a petición del líder de Jarabe de Palo, es probablemente una de las entrevistas más impresionantes que se pueden ver.  

Pau Donés fallecía en junio de 2020, dos semanas después de que se grabase la entrevista con Évole. La charla es un testimonio sereno de una persona que afronta los últimos días de su vida de forma consciente y con la voluntad de dar un mensaje claro, gracias a la vida. Era deseo expreso de Pau Donés a Jordi Évole y Ramón Lara, los directores, que la entrevista se emitiese una vez él ya no estuviese, y así fue.

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Eso que tú me das

El documental se rodó en la casa del artista en el Vall d’Aran, y fue la despedida ante las cámaras de Pau y Jordi, dos amigos que ya habían llorado todo lo que tenían que llorar en la intimidad, como confesó Évole. El propio Jordi hablaba sobre la entrevista, de la que decía que era una pieza única, y sobre cómo se había gestado: «15 días antes de morirse, me llamó y me dijo ‘quiero dar una entrevista como nunca se la he dado a nadie, porque me voy a morir, me estoy muriendo«.  

Jordi Évole confesó que fue duro para él ver como su hija Sara le ponía los zapatos y que le dijera igual tendrían que parar varias veces para que Pau fuera al baño, de hecho, su hermano le confesó que tenía prisa en hacer la entrevista. «Estuvimos tres horas por la mañana en su casa del Valle de Arán y por la tarde subimos a un prado. Él iba enganchado a un gotero, lo metió en el coche y subió conduciendo su Jeep«, dijo Évole sobre la parte en la que se desplazaron a un prado con unas vistas extraordinarias donde Pau Donés habló de la vida y terminó cantando El sitio de mi recreo de Antonio Vega, canción que eligió para ser «los créditos de su vida».