En plena pandemia del COVID-19 la mayoría de las personas ven las mascarillas transparentes como un complemento más que llevar en el día a día. Sin embargo, hay algo importante que debemos de recordar y es que no son solo un simple accesorio sino que es un elementos imprescindible para no contagiarnos con posibles virus muy peligrosos. Por lo tanto, debemos de tener mucho cuidado a la hora de escoger la que será nuestra mascarilla.
¿Qué pasa con las mascarillas transparentes?
Se está hablando mucho de las mascarillas transparentes porque están muy a la moda y porque para algunos profesionales de ciertos sectores les permite mostrar sus gestos, lo que es importante, como por ejemplo para los profesores. Pero también para las personas sordas o con alguna discapacidad que implica problemas de comunicación.
Las mascarillas transparentes como las de estampados y de colores han sido puestos en el objetivo por los influencers que son los primeros en probarlas con estilos diferentes para sus conjuntos y también para llamar la atención. Sin embargo, no debemos perder de vista que en España hay un millón de sordos, siete millones de personas con problemas auditivos y miles de niños con espectro autista que precisan ver el rostro para poder comunicarse.
