Las empresas de actividades para niños están «al borde del colapso»

Las empresas de actividades para niños denunciar estar «al borde del colapso» tras un verano sin constatar casos de coronavirus. Según datos de la Asociación Nacional de Empresas de Actividades y Campamentos (ANEACAMP), el 65% de las empresas organizadoras de campamentos no pudieron abrir sus puertas este año (desde que tuvo lugar la pandemia) y, de estas, cerca del 80% están abocadas a un cierre definitivo.

Además, las pérdidas acumuladas hasta octubre de 2020, llega al 75% de la facturación anual de media. Los cálculos de este colectivo establecen pérdidas de 150.000 puestos de trabajo directos además del impacto que tiene la falta de viajes escolares en los puntos de destino.

La ANEACAMP afirma que durante el periodo de confinamiento, el colectivo estuvo trabajando para buscar un consenso tratando de crear un marco regulador único ante la crisis del COVID-19. A pesar de que cada comunidad autónoma tuvo que crear su propio protocolo basado en el documento creado por ANEACAMP, los datos a final de verano han demostrado, según la asociación, que el sector está preparado para aplicar los protocolos de forma eficaz, al no constatarse casos.

Pero pese a ello, la asociación denuncia que el sector se encuentra actualmente «en una situación límite», ya que la incertidumbre se adueña del mercado y son los viajes escolares, tanto de actividades como de nieve, los que en muchas ocasiones no encuentran ni la legislación, ni los apoyos necesarios que den la seguridad suficiente a los colegios y familias para programar actividades a lo largo del año.

«Necesitamos trasladar a las familias y colegios la seguridad de nuestros protocolos y nuestro conocimiento de la actividad para salvar un sector esencial en nuestra sociedad y que se encuentra en una situación extremadamente peligrosa», declara José Manuel Fernández, portavoz de la patronal de empresas de Actividades y Campamentos.

A su juicio, el sector está preparado para afrontar la temporada, tal y como ocurrió en verano, con una oferta segura y adaptada, pero «el mercado tiene miedo por la falta de mensajes claros a nivel institucional».

«Por parte de la ANEACAMP estamos preparando una propuesta para ayudar a los responsables a buscar formulas que den seguridad al mercado, siguiendo con nuestra labor constructiva y de apoyo a las instituciones, pero necesitamos que sean las instituciones las que nos ayuden a trasladar que este, al igual que ocurrió en la temporada de verano, es un sector preparado para afrontar esta situación con plenas garantías», asegura.

Así, desde ANEACAMP consideran que es el momento de tener una reunión urgente con las instituciones públicas para estudiar medidas de apoyo al sector y para crear una estrategia que permita salvar la temporada tanto de invierno como las próximas primavera y verano y establecer puntos de encuentro con las instituciones para dar respuesta a la demanda que la sociedad reclama al sector.