Empezar una dieta y seguir una alimentación sana y balanceada es vital si tus objetivos son bajar de peso, pero si no cumples un horario adecuado para tus comidas el plan se cae a pedazos y no obtendrás los resultados que deseas.
Mantener un horario fijo a la hora de tus comidas es tan importante como la dieta misma. Asimismo, no debes dejar a un lado tu rutina de ejercicios.
Comer en horas desadecuadas es muy malo para el cuerpo porque el metabolismo no es el mismo y no estás quemando la grasa que normalmente deberías.
¿En qué horarios debo comer?
Antes que nada debemos destacar que existe un estudio por parte de la Universidad de Surrey (Reino Unido). Dicho estudio, demostró que si adelantas la cena un tiempo de 90 minutos y aplicas lo mismo para el desayuno retrasándolo en este caso, podrás causar cambios fisiológicos realmente positivos.
Se trato de un estudio de 10 semanas, en las cuales las personas rebajaron su consumo calórico y por ende redujeron su grasa corporal. Previniendo así, enfermedades como la diabetes.
De igual manera los investigadores pudiendo comprobar que al no tener restricciones horarias en su alimentación, las personas deterioraban su salud y al mismo tiempo tenían más grasa corporal.
En conclusión. Comer a las mismas horas cada día, mañana, mediodía y noche es lo más recomendable para la salud.
Desayuno. 7:00 a.m.
Uno de los requisitos que más se menciona y es clave, es el de concentrar el mayor número de calorías que puedas para esta comida.
Para desayunar te aconsejamos alimentos ricos en fibra y proteínas acompañado de verduras en tu dieta. Una opción que puedes tener en cuenta son los huevos al horno con verduras, plátano y un poco de almendras. Como bebida para estas horas de la mañana te recomendamos el té de limón para que te despiertes, dejando a un lado el café.
Almuerzo. 1:00 p.m.
Llegado el momento de almorzar toma en cuenta por consumir una comida con un poco de menos calorías que las que ingeriste en el desayuno.
Si luego del almuerzo quedas con hambre una opción de frenarla es comiendo frutas que contengan fibra y promuevan la digestión. Como opciones para incluir en la dieta tienes a los plátanos o manzanas.
Cena. 7-9 p.m.
Esto en principio dependerá de la hora en la cual te vas a dormir y así poder establecer un mejor horario para esta comida. Lo que se recomienda es comer unas 3 horas antes de acostarse, tiempo suficiente para la digestión y así poder tener un sueño de calidad.
Existen múltiples opciones para la preparación de la cena, siempre y cuando sea una comida ligera. Una comida pesada es lo peor que podrías hacer cuando en un rato te vayas a dormir.
Una alternativa saludable sería preparar una ensalada con pan integral. Se aconseja un platillo basado en verduras altas en fibra y carbohidratos. Puedes culminar la cena con una fruta por si todavía quedaste con hambre.
Practicas la dieta y, ¿no adelgazas?
Muchas de las razones por la cual no consigues tus objetivos pueden ser los siguientes:
- ¿Eres constante? Si eres de las personas que empieza una dieta diferente cada lunes o se ponen a régimen cada par de meses, entonces el problema son tus hábitos. Debes cambiarlos.
- ¿Practicas correctamente la dieta? Cada detalle por más pequeño que parezca es importante. Dejar pasar un comida, comer en mayor cantidad ciertos alimentos. Son causas comunes.
- ¿Haces actividad física o ejercicio? Una buena dieta combinado con un poco de ejercicio potencia mucho los resultados. Si actualmente tienes una vida muy sedentaria, esto puede ser el motivo.
Otros motivos que afectan tu dieta
Además de las razones explicadas en el párrafo anterior se tienen otras posibles causas:
- Medicamentos. Algunos fármacos reducen la velocidad en la que el cuerpo quema las calorías, así como también favorecer la retención de líquidos o aumentar tu apetito.
- Genética. Esa herencia genética puede hacer que el proceso para perder peso sea mucho más difícil. Pero es mucho más común adoptar malos hábitos alimenticios cuando estamos pequeños.
- Hipotiroidismo. Es un trastorno en la cual la glándula tiroides no produce la suficiente tiroxina. Hormona que promueve el metabolismo basal. Por ende cuando la producción se ve afectada y el metabolismo se hace más lento.
- Menopausia. Si ya pronto entras a la menopausia es muy probable que el aumento de peso sea producto de los cambios hormonales. Pues, durante el desarrollo de la perimenopausia, aproximadamente el 75% de las mujeres aumentan un rango de 4 a 10 kilos.
- Mal sueño. Por si no lo sabías, mientras estas durmiendo se liberan hormonas que son capaces de controlar el gasto energético y el apetito. Si duermes tus 6 a 7 horas se mantendrá en equilibrio. Si pasas mala noche descansando menos de lo habitual, habrá un desequilibrio, dando como resultado que tendrás más hambre.
A continuación queremos brindarte unos consejos que tienes que tomar en cuenta.
Consejos importantes para una dieta saludable
Te explicaremos ciertos tips que te ayudarán a alimentarte de la forma correcta.
- Fibra y vitaminas. Toda dieta balanceada tiene que tener un muy buen aporte diario de vitaminas y fibra. Incorpora alimentos integrales así como también las frutas.
- Reduce el consumo de sal. Todo en exceso es malo y pues pasarnos de sal en la preparación de las comidas nos causará problemas de presión sanguínea.
- Hidratación. No hay nada mejor que el agua para ello. Evita lo mas posible las gaseosas y por el contrario consume más a menudo zumo de frutas.
- Planifica lo que vas a comer. Este buen hábito te ayudarás a saber lo que tienes que comprar sin dejar nada al azar.
- Visita a un experto en la materia. Lo mejor que puede hacer un principiante antes de iniciar una dieta es acudir a un nutricionista. Te orientará en los hábitos que debes de adoptar, el peso que tienes bajar, los alimentos que debes de comer y más.
Practicar una dieta no es complicado pero sino la aplicas adecuadamente perderás tu tiempo y hasta tu salud puede verse afectada.
