El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha defendido que el nuevo Sistema Nacional de Movilidad, que el Gobierno equipara a los sistemas de Salud, Dependencia o protección civil, estará dotado de «mucho esfuerzo y recursos» con el fin de alcanzar un proyecto «ambicioso».
Así lo ha trasladado la secretaria general de Transportes y Movilidad, María José Rallo, durante su participación en un coloquio ‘online’ organizado por Executive Forum, con la colaboración de Indra y EcoRaíl, donde ha concreto más detalles de la llamada Estrategia de Movilidad.
Este plan estará marcado por tres vectores que considera clave, como son la descarbonización, la digitalización y las nuevas tendencias demográficas, para cambiar «el enfoque del propio Ministerio y afrontar los retos que se presentan».
Rallo también se ha referido a la nueva Ley de Movilidad Sostenible y Financiación del Transporte como el instrumento jurídico y regulatorio de esta estrategia y que contendrá leyes sociales, sectoriales y fiscales.
Es en esta ley en la que se enmarcaría el próximo Sistema Nacional de Movilidad, que tendrá entre sus pilares el disponer de un Sistema de Información Global sobre Transporte y Movilidad, digitalizado y en tiempo real entre las administraciones en España.
«La sociedad nos exige un diseño coordinado de políticas; la disponibilidad de información y datos para un diseño robusto de políticas de movilidad y la rendición de cuentas serán factores clave», ha concluido Rallo.
Por su parte, la directora del Mercado de Transportes de Indra, Berta Barrero, ha destacado durante su intervención la importancia de una Ley «valiente» para transformar realmente la movilidad: «Eso solo se puede conseguir con tecnología que permita integrar los sistemas inteligentes de transportes, extraer el valor del dato y ponerlo al servicio de la Administración, que es la responsable del uso eficiente de los recursos públicos».
Por último, el director de EcoRaíl, Juan Antonio Cuesta, ha resaltado que el operador privado pretende «estructurar a nivel estatal un servicio ferroviario tanto de viajeros como de mercancías, que suponga un complemento verde y eficaz para los desplazamientos terrestres actuales», lo que conllevará un mayor empleo de la red ferroviaria española, cuyo uso es inferior al de los países vecinos.
