Lo ha demostrado. David Vidales no es un piloto al uso. Ya no. Ha pasado de competir en las escuelas y en las últimas categorías de karting para dar el paso definitivo: los monoplazas. Y de qué forma: ganando desde su debut en la Fórmula Renault, el primer escalón de un piloto después de sus aventuras bajo los mandos de un kart, como ya hiciera entonces Fernando Alonso.
Así, el joven David Vidales se ha consagrado de la mejor forma posible: llegando y besando el santo. Un primer arranque en el inicial de los monoplazas con pole, vuelta rápida y victoria, por dos veces en las dos carreras, que lo hacen como un piloto al que hay que tener en cuenta y con un ojo repasando las temporadas y categorías que vaya realizando. Por tanto, y con una historia nueva por contar, tendremos de nuevo a un joven al que seguir la pista como ya hiciéramos entonces con Fernando Alonso. Lo conocemos.
