No solo se trata de una costumbre fea y antiestética, sino que puede ocasionar dolencias como sangrados, infecciones y hasta malformaciones en los dedos o en los dientes. Si eres de las personas que se muerden las uñas, mejor piénsatelo dos veces antes de volver a hacerlo, porque se trata de una actividad que puede traerte muchos inconvenientes.
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Morderse las uñas
Esta actividad desagradable tiene un nombre científico, que es la onicofagia, que consiste en morderse compulsivamente las uñas de los dedos de las manos, y sin duda, es una costumbre que puede afectar tu vida de múltiples maneras, tanto emocional, como social y, lo más grave, desde el punto de vista físico.
De hecho, si alguien te menciona el término onicofagia, es probable que no tengas la menor de idea de a lo que a se están refiriendo, pero si te dicen que quiere decir “comerse las uñas”, entonces las ideas se te aclaran y hasta puede ser una actividad que tu hagas con frecuencia, pero hay una cantidad de razones por las que no deberías hacerlo, que incluyen tu buena salud.
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¿Dónde se pueden tener problemas físicos cuando nos comemos las uñas?
La cantidad de efectos físicos que se pueden producirse por causa de comerse de modo compulsivo las uñas es larga, comenzando por llegar a tener problemas en la dentadura, importantes problemas bucodentales, sufrir de deformaciones en la cutícula de las uñas, pasando por infecciones, aparición de verrugas y de toda clase de alteraciones que se relacionan con la dermis y, en casos serios, la epidermis de la piel, pudiendo llegar a producirse la pérdida de las uñas.
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¿Quiénes son más propensos a sufrir de onicofagia?
Los que han podido observar los científicos es que esta compulsión de comerse las uñas es más frecuente en los adolescentes y los niños, pero que normalmente va a ir desapareciendo a medida que llegan a la etapa adulta, aunque eso no significa que la compulsión desaparezca, sino que sea sustituida por otra, como fumar, morder los lápices o tocarse frecuentemente el cabello, entre otras.
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Hay que considerar siempre que se trata de una conducta compulsiva
Lo que significa que aquellos individuos que practican la onicofagia, lo hacen de manera inconsciente, sin darse cuenta y sin poder controlar esta acción. Se trata de un hábito que se hace de manera automática, adictiva e inconscientemente y se ha podido determinar que tiene un origen psicológico.
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¿A qué tipo de trastorno corresponde la onicofagia?
Se trata de uno de los llamados trastornos obsesivos compulsivos, que están relacionados con grados elevados de ansiedad que son difíciles de manejar por los individuos. De modo que los grandes niveles de ansiedad y estrés hacen que el individuo adopte ciertas conductas del tipo compulsivo que lo ayudan a contrarrestarlos.
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¿Cuáles son los motivos por los que nos mordemos las uñas?
Entre las causas por las cuales nos mordemos las uñas pueden encontrarse:
- El miedo o temor: puede tratarse desde una simple incertidumbre hasta un miedo real, y es un elemento que está asociado a morderse compulsivamente las uñas.
- Baja autoestima o timidez: el perfeccionismo, la rabia, la frustración o tener un nivel alto de exigencias son rasgos que se asocian con el hecho de que las personas de muerdan las uñas.
- Situación de ansiedad: normalmente morderse las uñas logra calmar a las personas que están sufriendo de un período de ansiedad, porque se disminuye el nivel de angustia o de nervios.
- Estrés: es el rey de los rasgos distintivos de una persona que se muerde las uñas. Este puede aparecer ante situaciones concretas, como tener que asistir a una reunión importante, rendir un examen o porque simplemente el nivel de estrés se nos ha ido acumulando con los días, cuando estamos pasando por un período especialmente complicado, por una situación social, personal o profesional.
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¿Cómo puede causarnos daño la onicofagia?
Modernos las uñas puede causarnos daños en tres niveles, siendo el primero de ellos el físico, porque producto de esta actividad se puede presentar un sangrado a nivel de las uñas, así como infecciones y desfiguración de las uñas, dedos y dentadura.
A un nivel emocional es posible que morderse las uñas nos genere cierta clase de frustración porque se trata de una conducta que no podemos controlar, y finalmente puede hacernos daño socialmente, porque se trata de una actividad poco atractiva tener las uñas de los dedos mordidas, lo que puede afectar la imagen del individuo.
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¿Hay algún tratamiento para evitar mordernos las uñas?
Existen muchas medidas que podemos tomar para impedir que sigamos mordiéndonos las uñas, desde usar esmaltes de uñas que tengan un sabor amargo, impedir que nuestras uñas crezcan cortándolas con frecuencia, masticar chicle en vez de llevarnos los las uñas a la boca, pero también se debe trabajar en la causa emocional que la causa, pero puedes emplear un truco que nunca falla.
Lo que debemos hacer es tratar de identificar las situaciones o momentos en los que sentimos más la compulsión de mordernos las uñas, o las emociones que nos llevan a hacerlo, y realizar terapias para poder controlar la manera en la manejamos esos momentos o esos sentimientos, por eso es importante también:
- Emplear técnicas de relajación para reducir lo que emocionalmente activa esta compulsión.
- Tratar de eliminar el hábito automático de modernos las uñas, creando hábitos personales más saludables.
- Aprender a gestionar y a entender nuestras emociones.
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¿Qué es lo que se ha determinado respecto a los efectos físicos que produce la onicofagia?
Desde el punto de vista dermatológico, se trata de una conducta que afecta a un gran porcentaje de la población, que se ha podido medir entre un 20% y un 45%, e incluso puede afirmarse que afecta más a las mujeres que a los hombres. Y si lo que el individuo se muerte son las uñas de los pies, eso podría ser la señal de que sufre de un problema bastante grave a nivel psiquiátrico.
Además, morderse las uñas puede provocar sangrados, infecciones y la aparición de hongos, debido a que se pueden acumular bacterias, virus y hongos en el área de la lesión, que afectan el desarrollo de las uñas, haciendo que tus manos se vean poco atractivas.
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