Los bollos suizos son una verdadera delicia para desayunar; con una masa suave y un sabor delicadamente dulce, estos bollos ponen de cabeza a todos y se convierten en una verdadera adicción para comerlos con café y comenzar con alegría el día.
Prepararlos en casa no es para nada complicado y tenerlos perfectamente esponjosos y dulcitos, es más fácil de lo que crees. Toma nota de lo que vas a necesitar y no te pierdas ningún detalle.
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Ingredientes para hacer 16 bollos suizos
Si alguna vez has preparado una masa para pan casero, hacer los bollos suizos resultará muy fácil para ti; y lo mejor es que, si nunca has preparado ni un pan, no hay ningún problema, ya verás que con esta receta, de que te salen a la primera, te salen.
Los ingredientes que necesitas para prepararlos son: 180 ml de leche entera, 200 gramos de azúcar común, 120 gramos de mantequilla, 50 gramos de levadura, 4 huevos, 550 gramos de harina y una pizca de sal.
Para hacerlos dulces y deliciosos: agua de azahar (puedes utilizar la casera), 2 huevos y azúcar común.
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Formas de preparar los bollos suizos
Para la preparación de los bollos suizos, existen básicamente dos recetas; una en la que se requiere preparar un pre fermento o esponja, y una en la que la masa se inicia con todo el proceso junto de una vez.
En este caso, como la preparación la haremos de la forma más sencilla, será con el segundo método, el cual, también te ofrece resultados sencillamente perfectos. Es una receta fácil de seguir, así que simplemente debes seguir cuidadosamente los siguientes pasos.
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Comienza la preparación
Coloca en un bol la leche templada, azúcar y mantequilla y con la ayuda de un batidor eléctrico o con unas varillas manuales, mezcla perfectamente.
Una vez que tengas bien integrados estos tres ingredientes, añade la levadura y los huevos e intégralos con la ayuda de una cuchara de madera o una espátula.
Bate todo muy bien, hasta lograr unificar y cuando notes que no hay grumos, añade la harina y la pizca de sal. Termina de integrar completamente la masa.
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El reposo, la clave para unos bollos suizos deliciosamente esponjosos
Cuando termines de unificar la masa, ponla dentro de un bol y déjala reposar por unos 45 minutos a una hora; tiempo tras el cual, verás como ha duplicado su tamaño.
El reposo de la masa es completamente necesario, ya que de esta manera, la masa tomara aire y se hará más suave y delicada para tener la consistencia perfecta una vez que se encuentre horneada, dando los matices propios de los bollos suizos.
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Prepara la bandeja
Para la preparación de los bollos suizos, debes contar con una bandeja o fuente apta para horno perfectamente lista antes de ponerlos para un segundo reposo. Por lo tanto, una vez que el primer reposo de la masa llegue a su fin, prepara la fuente indicada.
Prepara la fuente forrando, con un trozo de papel sulfurizado; así evitarás que los pancitos se peguen. También puedes untarla con un poco de mantequilla o aceite de girasol o de oliva, pero suave.
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Así se les da forma a los bollos suizos para garantizar que queden divinos
Una vez que tengas lista la bandeja, toma la masa previamente reposada por el tiempo indicado y desgasifícala presionando suavemente con tus manos. Con la ayuda de un cuchillo filoso, o con un cortador de pastas, corta 16 porciones del mismo tamaño.
Para facilitar el corte y ayudar a que todos queden del mismo tamaño, puedes cortar la masa en dos porciones grandes y luego cortar cada una de mitad en mitad hasta tener todos cortados. Forma bolas o cilindros y ponlos sobre la bandeja lista.
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Reposo final de los bollos
Cuando termines de dar forma a los bollos suizos y de ponerlos en la bandeja preparada anteriormente, es el momento de dejarlos reposar para que ganen mayor esponjosidad y delicadeza.
Déjalos reposar por una hora y media para que crezcan un poco más. Realiza un corte no muy profundo sobre cada uno de los bollos suizos y que reposen por el tiempo indicado. (recuerda que la forma de los bollos puede ser la que prefieras, cilindros, bolas, etc.)
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Así los haces bien dulcitos y ricos
Una vez transcurrido el tiempo de reposo de los bollos suizos, mezcla en una taza el azúcar con apenas unas gotas de agua de azahar. El azúcar no debe disolverse; por el contrario, solo debe quedar lo suficientemente humedecida para formar grumitos.
En una taza aparte, bate 2 huevos y con un pincel de cocina, pincela cada bollo suizo. Toma con una cucharilla pequeñas porciones del azúcar humedecida y ponlas sobre cada uno de los cortes que le practicaste a los bollos suizos. Con esto, quedarán aromatizados y muy dulces, perfectos para desayunar.
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Hornéalos y disfrútalos
Cuando los tengas listos, llévalos al horno, el cual debe estar precalentado a 250 °C y con calor arriba y abajo.
Hornéalos en la parte media o baja del horno (sin llegar a tocar el fondo) y deja que se horneen por unos 10 minutos. Retíralos cuando luzcan doraditos y no los descuides, ya que se pueden quemar fácilmente.
El tiempo de horneado dependerá radicalmente del tamaño de las porciones de masa con las que preparaste los bollos suizos, si los haces muy pequeños, no los descuides a partir de los 5 minutos de horneado.
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Ideas para disfrutar de unos ricos bollos suizos para desayunar
Los bollos suizos son perfectos para que los lleven los niños al colegio, los lleves al trabajo y para que los ofrezcas a una visita inesperada con una rica taza de café. Si te gustan aún más dulces, prepara una rica crema pastelera y decóralos con un poco.
También puedes añadir un poco de coco rallado a la mezcla de azúcar y agua de azahar y así darles un sabor y perfume sencillamente espectacular. Anímate con esta receta y llena de sonrisas a todos en el hogar.
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