Dormir es una de las actividades a la que más tiempo le dedicamos. Una tercera parte de nuestras vidas la pasamos en la cama. Por lo que hay que darle la importancia que se merece, sobre todo si posees algunas de las enfermedades que te impiden conciliar el sueño.
Tienes que ponerles remedio, ya que la falta de sueño te va a afectar en tu día a día empeorando tu rendimiento y dándote una sensación de cansancio general. A continuación, te mostramos las enfermedades que te impiden dormir o conciliar el sueño.
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LA MEJOR POSTURA PARA DORMIR
Mucha gente no le da importancia a la postura que coge mientras duerme. Además de la cantidad de horas de sueño, hay que poner el foco en la calidad de ese sueño para descansar en condiciones. Por este motivo, tienes que adoptar una postura que sea beneficiosa para tu cuerpo y que permita que tus músculos y articulaciones se relajen. Cosa que también podría afectar si tienes alguna de estas enfermedades…
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LAS VENTAJAS DE DORMIR BOCA ARRIBA
Dormir boca arriba es la forma de acostarnos más idónea para equilibrar todo el peso del cuerpo. De esta manera, mantienes los órganos internos alineados y previene el dolor de cuello y espalda si no utilizas almohadas muy altas. Para mejorar esta postura, puedes colocarte una almohada debajo de las rodillas para ayudar a mantener la alineación correcta de la espalda y así evitar dolores lumbares a la mañana siguiente.
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DORMIR BOCA ABAJO
Dormir boca abajo no es una postura recomendada para descansar. Si adoptas esta posición, estás obligando al cuerpo a mantener una postura forzada durante varias horas seguidas. De esta forma, ejerces una excesiva presión sobre la zona cervical que involucra músculos, tendones, nervios y huesos. El estrés al que se sometida la columna vertebral puede llegar a provocar problemas como tendinitis, lumbalgias o incluso cervicalgia. Es muy cómodo, pero a la larga te puede pasar factura…
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INCONTINENCIA URINARIA
A medida que se cumplen años es habitual que te entren ganas de hacer pis con una mayor frecuencia. Cuando antes aguantabas toda la noche, ahora te despiertas más a menudo porque tienes ganas de orinar y luego te cuesta volverte a dormir. Este problema afecta en mayor medida a las mujeres que a los hombres. Lo que tienes que hacer es reducir el consumo de líquidos varias horas antes de irte a la cama.
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MIGRAÑA, UNA ENFERMEDAD QUE AFECTA PARA DORMIR
Las migrañas o dolores de cabeza intensos pueden evitar que concilies el sueño y despertarte a mitad de la noche. Quedarte en la cama dándole vueltas a la cabeza no va a hacer que te duermas, por lo que para ayudarte a que se pase ese episodio debes estar bien hidratado. Además, la falta de sueño va a provocar que se acentúen las migrañas.
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ENFERMEDAD PULMONAR OBSTRUCTIVA CRÓNICA (EPOC)
La EPOC engloba enfermedades respiratorias como la bronquitis crónica, el enfisema o el asma, entre otras. Por lo que estas dificultades para respirar con normalidad pueden conllevar que te despiertes varias veces a lo largo de la noche. Además, algunos de los fármacos para tratar estas dolencias pueden provocar trastornos del sueño. Para evitarlo, sigue una rutina a la hora de irte a dormir y evita que haya distracciones a la hora de irte a dormir.
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LA DEPRESIÓN IMPIDE CONCILIAR EL SUEÑO
Es habitual que las personas con depresión les cueste dormir, cosa que agrava su enfermedad. Puede producir cambios de humor, desgana o apatía, un aumento o una pérdida de peso y en los casos más extremos pensamientos suicidas. Por este motivo, a los enfermos se les receta medicamentos que les ayuden a dormir, aunque estos también tienen efectos secundarios.
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LA ANSIEDAD A LA HORA DE DORMIR
La ansiedad es una dolencia que también produce problemas para conciliar el sueño. Este transtorno se caracteriza por la incapacidad de quedarte quieto, irritabilidad y dolores musculares. Si este problema se alarga en el tiempo, es recomendable que acudes a un psiquiatra para que te dé medicación. Todavía quedan más enfermedades que hacen que impidan dormir…
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LA MENOPAUSIA AFECTA PARA DORMIR
La menopausia implica multitud de cambios hormonales que también afectan a la hora de dormir. Los sofocos nocturnos, los transtornos respiratorios o el insomnio son síntomas habituales de esta etapa hormonal. El tratamiento con estrógenos y progesterona puede ayudar a aliviar los síntomas de la menopausia, aunque provoca otros efectos secundarios. Lo recomendable es que te pongas en manos de tu médico de cabecera para que te establezca un tratamiento personalizado.
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SÍNDROME DE LAS PIERNAS INQUIETAS
En último lugar, te mostramos cómo el síndrome de las piernas inquietas afecta a la hora de conciliar el sueño. Esta dolencia afección se manifiesta con diversos síntomas como sensación de irritación, hormigueo o pinchazos en las piernas antes de dormir. Por lo que va a retrasar tu ritmo circadiano e incluso podría llegar a despertarte en mitad de la noche con algún movimiento involuntario.
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