¿Horno dañado? Probablemente pueda ser la resistencia. Y es que es muy notable cuando algo anda mal con respecto al electrodoméstico.
Por lo general, si el horno ya no logra calentar como antes , es muy probable que alguna de las resistencias se haya dañado. Así que si esto ocurre y te encuentras en garantía por ejemplo, al llamar algún encargado de la tienda en el que lo compraste, te enviarán a un técnico experto en ello.
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En caso que el problema sea la resistencia pero este ya no se encuentre en garantía, tienes la opción de llamar a un técnico especialista por tu cuenta. O simplemente aprender cómo hacer el cambio y que este quede perfecto.
Así que a continuación te enseñamos cómo puedes hacer el cambio de una resistencia paso a paso y sin problema para que puedas usar el electrodoméstico como el primer día.
¿Cómo hacer un cambio de resistencia a un horno sin problemas?
Antes de realizar el cambio de resistencia a un horno, es necesario evaluar cuál es la resistencia que se ha dañado. Para poder corroborar cuál debes hacer una limpieza general y luego probar al encender dos resistencias. Es decir una de abajo y arriba y luego el termostato a una temperatura baja.
Cuando note que calentó , puedes acercar con mucho cuidado una mano en la zona de las partes para evaluar si funcionan o no correctamente. Solo debes cambiar la resistencia que se encuentre completamente fría.
Tenga en cuenta que si ninguna de las resistencias se encuentra dañada, eso quiere decir que el problema del horno proviene desde otro punto. Puede ser el termostato o el mando de encendido.
Si tienes dudas al respecto puedes consultar con un técnico encargado en falla de horno.
Ahora bien, en caso que sea la resistencia, para hacer el cambio necesitarás:
- Destornillador de estrella.
- Multímetro (también llamado polímetro o tester).
- Nueva resistencia.
Procedimiento
En caso que la resistencia de la zona inferior del horno se encuentre dañada:
Lo que debes hacer es sacar el horno que por lo general está sujeto a cuatro tornillos que encontrarás al abrir la puerta y que lo sujetan al mueble.
Luego lo que debes hacer es tirar suavemente para sacar el horno siempre manteniendo la puerta cerrada. Recuerda que tienes el cable de conexión. Así que debes hacer el proceso en un sitio cómodo en el que puedas mantener el horno apoyado.
Por lo general la zona trasera del horno tiene una tapa o especie de chapa que está sujeta por algunos tornillos. Así que dependiendo del modelo, tendrás que abrir esta zona.
Al quitar los dos tornillos de abajo, se abrirá una tapa donde estará la resistencia.
Lo que debes hacer luego es desconectar los dos cables que son amarillos y debes separar el aislante de fibra de vidrio con unos guantes. Esto a fin de evitar el picor que genera este tipo de materiales.
Evalúa si la resistencia finalmente se encuentra dañada usando el multímetro en la posición de medir continuidad. Debes colocar una punta en cada uno de los terminales de la resistencia. Si emite un pitido significa que funciona correctamente, por lo que el problema será otro diferente.
Si no hay continuidad, solo debes quitar los tornillos faltantes y saca la resistencia para sustituirla por una nueva.
Mantenimiento del horno
La sal es el poderoso ingrediente de la cocina y que al parecer es uno de los tantos reyes para limpieza. La sal puede ser usada para limpiar el horno debido a que posee una función astringente que absorbe la grasa acumulada y por ende facilita la limpieza.
Además de que este producto no causa olores fuertes como sucede con el vinagre o los productos químicos.
Lo que debes hacer con la sal para limpiar el horno es lo siguiente:
En un recipiente deben mezclar 10 cucharadas de sal con 4 cucharadas de agua. En caso de que la pasta te quede un poco liquida puedes añadir un poco más de sal.
Luego debes proceder a esparcir la mezcla por todas las superficies interiores del horno, particularmente en aquellas donde se encuentren los residuos y la grasa acumulada. Deja que la sal actúe por 2 horas, aunque si lo prefieres también puedes dejarla toda la noche.
Finalmente solo tendrás que enjuagar con un paño húmedo. No será necesario que frotes con demasiada fuerza ya que las manchas saldrán con facilidad.
Cuando se trata de limpieza en electrodomésticos es mucho mejor utilizar productos naturales. Estos no son agresivos y permiten un acabado oloroso sin exageración.
Sin embargo, si deseas usar detergente con un poco de cloro, debes asegurarte que estos se disuelvan bien en el agua y al momento de limpiar, asegurarte de retirar muy bien. Es decir que cuando limpies el horno con detergente y cloro, debes retirarlo muy bien con un paño con agua.
