El Real Madrid y Florentino Pérez no consideran casual la publicación en el diario digital de ‘El Confidencial’ de unos audios del año 2006 (y otros de más adelante) en los que el entonces dimitido presidente Florentino Pérez criticaba a varios futbolistas del club. Primero salieron a luz críticas contra Iker Casillas y Raúl González, pero más tarde surgieron otros donde despotricaba sin reparo ante nombres como Cristiano Ronaldo, Guti, Figo, Özil… incluso Mourinho o Del Bosque.
En cierto modo, la entidad cree que se trata de una conspiración para minar la imagen de Florentino Pérez en un momento en que se ha convertido en la bandera de la Superliga frente a instituciones como la UEFA y la Liga de Fútbol Profesional, que presionan a todos los niveles para derribar el proyecto. Ahora la pregunta que circula sobre el dirigente es, ¿debe dimitir ante esto? Lo repasamos.
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La crisis institucional del Real Madrid desde el 2003 al 2006, el eje de los problemas de Florentino Pérez
«Las dos grandes estafas del Madrid son primero Raúl y segundo Casillas«, decía el presidente blanco hace 15 años, cuando ambos jugadores aún formaban parte del equipo y cuando Florentino Pérez había pasado a ser un socio más tras abandonar su cargo.
Es decir; en principio, esos audios se grabaron con el presidente fuera ya de la Junta Directiva. ¿Pero cuál fue el motivo de este enfado? Cabe recordar que Florentino Pérez abandonaba el club muy decepcionado con la actitud de los futbolistas.
En aquella época el club merengue estaba sumido en una grave crisis institucional y de resultados. Las temporadas 2003-04 y 2004-05 habían terminado sin títulos y con múltiples cambios de entrenador. Carlos Queiroz, José Antonio Camacho, Mariano García Remón y posteriormente Vanderlei Luxemburgo, que empezó la campaña 2005-2006.
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El caso de los audios de Florentino Pérez recuerda a su primera salida: «He maleducado a los jugadores»
Pero la mala racha del Real Madrid siguió y en diciembre fue sustituido por Juan Ramón López Caro López, pero el equipo no reacciona. Deja de ser competitivo en todos los frentes. El 27 de febrero, con el Madrid a la deriva y después de una sonrojante derrota en Mallorca, Florentino Pérez dimite. “He maleducado a los jugadores», se autoinculpó.
En la rueda de prensa en la que anunció su renuncia, el presidente blanco no se mordió la lengua y señaló claramente a los jugadores. Al ser preguntado por los periodistas, mostró su desencanto con el vestuario, del que dos de sus principales líderes eran justamente Raúl e Iker Casillas, y a los que en cierto modo culpaba de la actitud del resto de la plantilla. Y es que tres años sin títulos es insostenible en un club como el Real Madrid.
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Las declaraciones de Florentino Pérez pueden abrir una brecha irreparable
Ahora, más de 15 años después, surge la duda de si estas declaraciones abrirán una brecha irreparable entre el líder y los empleados o si, por el contrario, podrán continuar como si nada hubiera pasado. El profesor colaborador de Deusto Business School, Jon Segovia, rompe una lanza a favor de Florentino.
«Hay que diferenciar el rol de la persona”. El experto hace referencia a que el contexto privado en el que se han vertido estas declaraciones es importante porque podrían venir de un momento de tensión. “¿Quién no le ha dicho barbaridades a un ser querido, incluso a un hijo, durante una discusión? Es inapropiado, por supuesto, pero tenemos que quitarnos la viga de nuestro propio ojo antes de mirar la paja del ojo ajeno. Es hasta infantil pensar que nuestros amigos o compañeros de trabajo no nos han criticado nunca”.
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Los jugadores podrían ver ahora la relación debilitada
Lo cierto es que la filtración, con todo, deja a los jugadores, cuerpo técnico y demás parte del Real Madrid en una tesitura complicada. Tanto a los más cercanos como a los que no lo son tanto. Sobre todo porque han visto su relación debilitada.
En esas, la tela de la confianza se ha rasgado, se puede coser, pero queda una cicatriz que siempre volverá a abrirse. Por eso, se cree que si Florentino Pérez no dimite, ellos acabarán marchándose: «Si el líder no es suficientemente valiente para dejarlo, es complicado continuar porque no hay confianza”.
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Las conversaciones aumentan el recelo de los aficionados
En estas conversaciones privadas, Florentino Pérez también se quejaba del egoísmo de los futbolistas y de la incapacidad de poder contar con ellos para algo. Aseguraba que, en su experiencia como presidente, el concepto que había obtenido de los jugadores había sido horrible.
De los galácticos, Zidane y Beckham habrían sido los únicos a los que Florentino habría dedicado buenas palabras, mientras que al delantero brasileño Ronaldo Nazario lo calificó, entonces, de «jeta«.
Estas declaraciones desafortunadas de Florentino Pérez han provocado reacciones negativas de la afición madridista que pide explicaciones al presidente por esa crítica directa a figuras determinantes para el club.
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La dimisión no se vislumbra: el dirigente demandará al periodista que grabó los audios
Si bien la salida de Sergio Ramos ya despertó algunas voces discordantes con el proceder de Florentino, estas conversaciones sacadas a la luz años después, aumentan el recelo de parte de los aficionados. Los aficionados ven en este desprecio a los jugadores la causa de que algunos de los mejores de la historia blanca hayan salido por la puerta de atrás.
En esas, todo apunta a que el presidente blanco no dimitirá, al menos, por su propia voluntad. De hecho, y según las últimas informaciones, el presidente del Real Madrid habría entregado ya toda la documentación requerida al prestigioso despacho de abogados de D. Gonzalo Rodríguez Murillo, con el objetivo de demandar al periodista que grabó dichos audios, José Antonio Abellán, y al medio que los ha publicado, ‘El Confidencial’. ¿Repercutirá en los fichajes de verano?
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