Palma celebra este sábado una prueba piloto para la reapertura del ocio nocturno

La discoteca Social Club Mallorca, en Palma, celebra este sábado una prueba piloto para valorar las condiciones de reapertura del ocio nocturno ante la pandemia de la COVID-19. El evento contará con un aforo máximo de 300 personas que deben ser mayores de 25 años.

Todos los clientes que participen en la prueba deben presentar un certificado oficial de COVID de la UE que indique que han sido vacunados con ambas dosis o con la primera dosis 15 días antes del evento. Los clientes no vacunados deben presentar una PCR negativa como máximo 72 horas antes del evento o una prueba de antígeno negativa.

Durante el evento, todas las personas estarán obligadas a llevar mascarillas FFP2 que solo podrán quitarse en el momento que vayan a beber. Además, sólo podrán realizarse las consumiciones en mesas habilitadas para este fin y con un máximo de 12 personas en exterior y seis personas en interior.

Otras normas para participar en la prueba piloto son: mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros, hacer uso del gel hidroalcohólico, no fumar en todo el recinto y no bailar o levantarse de la mesa salvo que sea para acceder a la pista de baile.

La prueba piloto en Social Club será tanto en la terraza como en las zonas del club y tendrá lugar de 21.00 a 02.00 horas.

CONCIERTO SIDONIE Y PRUEBA PILOTO EN IBIZA

Por otro lado, este pasado viernes por la noche tuvo lugar un concierto piloto del grupo catalán Sidonie, en el marco del Mallorca Live Summer. El evento, para un máximo de 5.000 personas, se realizó con mascarillas y sin distancias de seguridad.

Para acceder al recinto, el Antiguo Aquapark de Calvià, los participantes debían presentar la entrada para el concierto, identificarse con el DNI en vigor y enseñar el Certificado Digital Covid.

También en Ibiza se realizó este pasado viernes una prueba piloto en el Hard Rock Hotel, con un aforo máximo de 1.500 personas. Desde Ocio de Ibiza han explicado que, tras el evento, llevarán a cabo un seguimiento posterior de los asistentes, principalmente de quienes se sometan al test de antígenos.