Rocío Jurado dejó un gran legado como artista que su familia no ha sabido recoger. El enfrentamiento entre Rocío Carrasco y Antonio David Flores están ahora de plena actualidad. Son muchos los que estos días dicen que si volviera a la vida, se moriría de nuevo del disgusto. Desde que la de Chipiona nos dejó, hace ya 15 años, su familia no ha dejado de estar enfrentada. A través de diversos programas de televisión hemos podido seguir día a día las peleas, enfrentamientos, infidelidades, adicciones, secretos hechos públicos, problemas con la herencia etc. Paseando por los platós de televisión los protagonistas han ido aireando todas sus miserias. Mohedano, Carrasco, Ortega son apellidos que todos conocemos y asociamos a la gran familia Jurado que Rocío luchó, sin éxito, por mantener unida.
Rocío Carrasco: Contar la verdad para seguir viva
Rocío Carrasco les dio el disgusto de su vida a sus padres cuando tomó la determinación de casarse con Antonio David Flores. Fue el típico amor adolescente que como muchos veían claro no tardó en romperse y convertirse en un campo de batalla. Lo que pasó en ese matrimonio Rocío Carrasco decidió mantenerlo en silencio hasta ahora, cuando ha rodado un documental que ha conseguido tener pendiente a casi todo el país.
Más de 60 horas de charla ha grabado Rocío Carrasco, en Mediaset le han dado el formato de un documental de 8 capítulos de los que ya se han emitido los dos primeros. Lo curioso es que de ser considerada una mala madre ha pasado a representar a las víctimas de malos tratos a pesar de que su denuncia por violencia de género ha sido sobreseída provisionalmente en un tribunal.
