El FC Barcelona lleva meses poniéndose manos a la obra para realizar un profundo cambio en su plantilla, proceso que pasa por la salida inmediata varios de sus jugadores. Sin embargo, gran parte de esta reestructuración tiene que ver con futbolistas que habían llegado como grandes apuestas de la directiva y que terminaron desfilando la puerta de salida de malas formas. Y todo apunta a Bartomeu.
Y es que el presidente culé ha terminado por hundir la moral de los aficionados barcelonistas, los cuales han visto cómo la gestión de la entidad presidida por Josep María ha dejado reflejado que los azulgranas viven uno de sus momentos más pobres, también a nivel estructural y económico. Repasamos las salidas de estos jugadores que habían sido fichados.
Marlon, Arthur y Rakitic, tres de los ejercicios más pobres de Bartomeu y el FC Barcelona
Entre los primeros, y que tenían ya puesto el cartel de ‘traspasado’ desde hace varios meses, se encuentra Marlon, un jugador que el FC Barcelona y Bartomeu compraron en Brasil hace pocos años pero que, finalmente, se despide marchándose por la puerta de atrás, también por la nefasta gestión del presidente. Cedido en el filial, fue comprado al Fluminense por cinco millones de euros. Esa campaña debutó con el primer equipo, pero también fue la de su despedida. Salió gratis.
A su lado vemos a Arthur, que resultó ser entonces de los fichajes más sonados por su gran proyección, algo que, en varias ocasiones, los aficionados pudieron disfrutar del juego del brasileño. En su caso entró en una operación de traspaso, del que Bartomeu lo dejó marchar por cerca de 70 millones. Un precio significativo del que no salen beneficiados.
Junto a ellos vemos la que ha sido la salida de Rakitic, que tenía su pase desde que Quique Setién se sentara en el banquillo culé. El croata, que salió con rumbo a Sevilla, dejó únicamente 1,5 millones de euros a las arcas culés, en un ejercicio muy pobre tanto del FC Barcelona como de Bartomeu.
Bartomeu negoció mal nuevamente las salidas de Vidal, Cillessen y Douglas Pereira del FC Barcelona
Una vez que el FC Barcelona y Bartomeu completaron la operación de Arthur Melo a la Juventus para poder acabar la temporada 2019/2020 en cuanto a lo económico, otro de los grandes nombres que terminaron por salir recientemente fue Arturo Vidal, uno de los jugadores que, si bien se conocía que su puesto pendía de un hilo en el FC Barcelona (con aviso de Koeman), su salida fue el peor negocio posible para Bartomeu.
Esto es porque el chileno, que llegó al Camp Nou hace menos de dos años, se acabada de despedir del equipo a precio de saldo, cuando llegó a cambio de 18 millones procedente del Bayern de Múnich alemán, y ahora se encuentra en el Inter por un traspaso que no llega al millón de euros (500.000). Su perfil atípico para el fútbol azulgrana provocó varios debates sobre su adaptación, pero su gran competitividad le permitió hacerse un hueco en la medular azulgrana.
Por otro lado tenemos al guardameta Cillessen, que fue una apuesta personal de Bartomeu pero, a pesar de que su rendimiento no era malo, terminó marchándose por falta de minutos. Aterrizó en Mestalla de la mano del Valencia tres años después por 35 millones de euros. Y aunque empezó la temporada como titular, una lesión muscular, de la que ya se encuentra recuperado, le hizo desaparecer de la portería en los últimos meses.
Otro caso muy singular para el FC Barcelona y Bartomeu es Douglas Pereira, un futbolista que se las prometía muy felices pero que finalmente no tuvo el lugar deseado ni por el club, ni por el equipo, ni por sus entrenadores. Es de los pocos laterales que en los últimos años debutó con el FC Barcelona y después abandonó el club, aunque en su caso no fue una venta. El brasileño llegó al Camp Nou en 2014, y tras dos temporadas en las que apenas disputó 8 partidos, fue pasando de cesión en cesión hasta que se le acabó el contrato. El pasado año se marchó como agente libre al Besiktas turco.
Las sorprendentes operaciones de Braithwaite, Bartra y Alcácer que nadie entendió en el FC Barcelona
Más llamativo es el caso de Braithwaite. El danés llegó en esa polémica operación para sustituir al lesionado Dembélé y desde Inglaterra están llegando las primeras ofertas por el delantero. El fichaje del delantero, que llegaba procedente del Leganés, hizo mucho daño al club madrileño, que se vio perjudicado por la salida del que era su goleador vital.
Junto a él tenemos también a Marc Bartra, y del que, posiblemente, sea de las ventas más nefastas del FC Narcelona y de Bartomeu en su conjunto. El catalán se formó en las categorías inferiores del club culé, debutando en 2010 de la mano de Pep Guardiola y en la temporada 2012//2013 se asentó definitivamente con los mayores. En aquel momento muchos le veían como el central del futuro… pero en 2016 el Borussia Dortmund pagó su cláusula de rescisión y Bartra se fue a la Bundesliga. Actualmente milita en el Betis, del que cuenta con una situación de privilegio con los verdiblancos.
En el caso de Paco Alcácer no se puede decir que haya sido un mal negocio de Bartomeu y la directiva… pero sí que ocurrió en el momento equivocado. Y nadie lo supo leer. Esto es porque el delantero, que provenía del Valencia, fue fichado por 30 millones. Pero todo salió mal. Alcácer dispuso de pocos minutos en los que, tras dos temporadas, quiso probar suerte en el extranjero. Salió con destino Dortmund y allí explotó. Su poderoso juego y sus grandes goles con los del Borussia le permitieron jugar la Champions durante su estancia. Posteriormente el Villareal se benefició de sus servicios, siendo hoy uno de los grandes fuertes del submarino y de LaLiga.
Umtiti, Digne y Semedo salieron sin premio del FC Barcelona
Samuel Umtiti, muy afectado por las lesiones, no cuenta con la confianza de la directiva ni del cuerpo técnico. Araújo le ha pasado por la derecha, pero lo difícil va a ser situarle en algún equipo teniendo en cuenta ese historial de problemas físicos. Y es que el francés no entra en los planes de Ronald Koeman.
El FC Barcelona le está buscando una salida, pero los problemas físicos que arrastra el defensa francés desde el Mundial de 2018 hacen que sea difícil colocarlo en el mercado de fichajes. Se ha habaldo mucho de posibles clubes interesados, pero, como negocio, su salida siempre será un fracaso. Y Bartomeu lo sabe.
En verano de 2016 el FC Barcelona ficha a Lucas Digne para que compita con Jordi Alba en el lateral izquierdo. Pero al español era muy difícil quitarle el puesto y tras dos temporadas el defensa francés optó por salir en busca de la regularidad que no tenía en el Camp Nou. En verano de 2018 fue traspasado al Everton por 20,2 millones de euros más variables.
El siguiente es Nelson Semedo, jugador portugués que, pese a las grandes expectativas para suplir a Dani Alves, nunca se acercó a lo que podría dar, o al menos a lo visto cuando militaba en el Benfica, hace tres años. El lateral, por su parte, tampoco contaba con la confianza necesaria de Koeman, y en las últimas horas se hizo oficial su venta al Wolves de la Premier League. Se marcha por un motín cercano a los 30 millones (más variables).
Cucurella, Neymar y Denis Suárez
En la Ciudad Condal han sufrido las consecuencias deportivas y económicas de una planificación defectuosa, y ya no se puede fallar más en un final de temporada que ha sido clave para formar de nuevo los éxitos a los que se aspira en el futuro. En plena crisis del coronavirus, eso sí, se ha dejado escapar una gran oportunidad. Es el caso de Marc Cucurella.
Y es que el del hoy del Getafe es cada vez más doloroso para los culés, que no entienden porqué se le dejó marchar. El canterano quería probarse en un conjunto de Primera División y en 2018 se fue cedido al Eibar, donde empezó a brillar como interior izquierdo. Argumentando que no era una apuesta segura para el lateral, los responsables barcelonistas le volvieron a prestar en 2019, y el joven siguió triunfando en el Getafe. En este último acuerdo ya no se incluyó opción de recompra, y los madrileños han conseguido hacerse con su propiedad.
Uno de los casos más importantes de la última década en el FC Barcelona es Neymar, tanto por su entrada al Camp Nou en 2013 como su polémica y angustiosa salida en 2017, primero con Rossell al frente y posteriomente con Bartomeu. Su lugar se reconoce a partir de la que sigue sienod hoy la venta más cara en el mudno del fútbol en su historia: 222 millones de euros.
La operación, con distintos rifirrafes entre Bartomeu, el FC Barcelona y los jeques parisinos, se materialzó con el PSG apostando de lleno por el brasileño. Sin emabrgo, tras tres años en París, en el Camp Nou sueñan con recuperarle y el brasileño tampoco ha podido olvidar su etapa como azulgrana. En 2019 estuvo a punto de regresar, pero todo indica que debido a la actual situación de la entidad culé su vuelta es remotamente imposible (de momento).
También conocimos a Denis Suárez, que fue uno de los grandes sueños de la afición culé hacia el futuro azulgrana. Y es que en 2013 fichó por el FC Barcelona pero fue cedido al Sevilla como moneda de cambio por el traspaso de Rakitic. En apenas dos años se desvinculó del club y fichó por el Villarreal para que 2016 los de la Ciudad Condal le volvieran a fichar tras pagar su cláusula. Sin oportunidades, al año siguiente viajó hasta el Arsenal, pero la falta de minutos le hicieron regresar a España de la amno del celta, ahora con un lugar idóneo en Vigo.
La regeneración culé obliga la aciaga marcha de Luis Suárez
La regeneración de la plantilla que Bartomeu encargó a Ronald Koeman, y que comenzó con los mencionados Rakitic y Vidal, continúa por una de las vacas sagradas. Es el caso de Luis Suárez, El Pistolero, que ha entrado de lleno en la historia del FC Barcelona ocupando un lugar prvilegiado como el tercer máximo goleador de la historia culé con 198 goles.
El uruguayo pone rumbo a Madrid, donde le espera la afición del Atlético de Madrid más ilusionada tras seis años de puro gol y olfato puro en el Camp Nou. El ‘9’, que aterrizaba en Barcelona en 2014 procedente del Liverpool se formó un hueco de postín en club, del que con Neymar y Messi primero, y con el argentino sólo después, formó uno de los tándem de ensueño para todo amante culé. El contrato para el jugador uruguayo es de dos temporadas. El futbolista llega a Madrid a cambio de 6 millones de euros.
