La vejez, todos lo sabemos, es una pesadilla. Nos encantaría ser eternamente jóvenes y no preocuparnos por las arrugas, el pelo que se cae, las canas…Y podríamos seguir así párrafos y párrafos, enumerando todos los incordios que traen consigo los años. Pero los relacionados con el pelo tal vez sean los que nos traen a todos y todas por la calle de la amargura.
A partir de una edad, empezamos a notar que nuestro cabello pierde consistencia, se cae con mucha facilidad y tarda mucho en crecer. Además, hay personas que tienen un cabello muy débil o delgado, o que padecen problemas de estrés, anemia o falta de proteínas. Todo ello no hace más que potenciar la caída del cabello. Pero no todo está perdido.
Existen numerosos remedios que nos ayudan a combatir este problema. Y no es necesario recurrir a planchas, tintes u otros químicos potentes. Con plantas y otros productos naturales es posible elaborar mascarillas y remedios que fortalecen nuestro pelo y realzan su belleza. Toma nota y prepara la lista de la compra para ir a la herboristería.
2Romero
El romero es una planta muy presente en nuestra geografía. Al igual que el aloe vera, tiene muchísimas propiedades y aplicaciones, tanto en el ámbito de la salud como en muchos otros. El agua de romero es idónea para frenar la caída del cabello y fortalecer el bulbo piloso.
La elaboración de este producto es también muy sencilla, económica y al alcance de cualquiera. Necesitarás dos ramas de romero y un vaso de agua de aproximadamente 200 mililitros. Desmenuza la rama de romero, pon el agua a hervir y haz una infusión. Deja las ramas en el agua hirviendo durante unos veinte minutos, y luego deja que se enfríe.
Luego, coge el producto resultante y aplícatelo por todo el cuero cabelludo dándote masajes durante quince minutos. Una vez pasado ese tiempo, aclárate con agua y lávate con tu champú hidratante.
