Cosas que jamás podrás hacer en tus sueños

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El mundo de los sueños o mundo onírico es realmente apasionante. Desde que tenemos testimonios escritos  se sabe que los hombres han prestado atención a sus sueños. De hecho, en la antigua Grecia y también en Roma había oráculos a los que se acudía para interpretarlos y en base a ellos se tomaban decisiones. La Biblia nos habla de los sueños de algunos de sus protagonistas.

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Teorías sobre el soñar

Existen diversas teorías que tratan de explicar por qué soñamos, algunos investigadores creen que los sueños no tienen un propósito real. Mientras otros sugieren que soñar es esencial para el bienestar mental, emocional y físico. Hay teorías que mantienen que los sueños son una manera de organizar la información que nos ayudan a almacenar los recuerdos. Otras teorías mantienen que los  sueños son un entorno seguro para hacer conexiones entre pensamientos y emociones de manera que nos podamos preparar para el futuro.

 En el año 1977, los científicos Allan Hobson y Robert McCarle propusieron el modelo de activación- síntesis una teoría neurobiológica para explicar los sueños.  Para ellos, los sueños son una reacción cerebral a los procesos biológicos que ocurren durante el sueño. Serían solo un subproducto de señales neuronales lanzadas al azar que nuestro lóbulo frontal intenta organizar con una estructura narrativa.

Para algunos investigadores los sueños no son más que una continuación de lo que vivimos en nuestro mundo de vigilia. De este modo, si  tenemos problemas en la vida real tendremos malos sueños.   Las pesadillas, por ejemplo, se forman con el material de nuestros miedos, ya que el  miedo son expectativas. Por eso, el mejor lugar para curar las pesadillas es dentro de ellas mismas haciendo frente a la ansiedad, que es una emoción con dos componentes el miedo y la incertidumbre.