La Policía Nacional y los Mossos d’Esquadra desarrollaron este martes una operación contra la inseguridad y los robos en el Metro de Barcelona, que se saldó con 70 identificados y 23 detenidos. De estos últimos uno tenía pendiente una requisitoria por hurto y 22 eran delincuentes habituales con trámites judiciales pendientes o que son extranjeros en situación irregular en España.
Según informó esta tarde la Policía Nacional, el “amplio dispositivo” tenía como fin la “prevención de hurtos” en el suburbano de la capital catalana. En la operación participó un centenar de efectivos de ambos cuerpos de seguridad.
La intervención buscaba “localizar a delincuentes reincidentes actuando in fraganti o en actitud de búsqueda de posibles víctimas”. Tras identificarlos y comprobar si tienen algún requerimiento pendiente, en el caso de ser extranjeros se verificó su situación administrativa en el territorio nacional.
La Policía explicó que 30 de los identificados fueron trasladados a comisaría para verificar su situación administrativa, resultando detenidos 22 ciudadanos extranjeros de diferentes nacionalidades en aplicación de la vigente Ley de Extranjería.
“DELINCUENTES MULTIREINCIDENTES”
La Policía destacó que los detenidos trasladados a comisaría “son delincuentes multirreincidentes identificados” y que han sido arrestados “en numerosas ocasiones por su relación con delitos contra el patrimonio, principalmente hurtos en el Metro” de Barcelona.
El operativo desplegó en estaciones del Metro barcelonés con gran número de usuarios, entre los que se concentran un elevado número de turistas que visitan los monumentos emblemáticos de la ciudad.
Para realizar la operación, en el Centro de Seguridad y Protección Civil del Metro se ubicaron agentes especializados para hacer un seguimiento a través de las cámaras de video vigilancia que existen en estas instalaciones.
La Policía añadió que el dispositivo desplegado tenía un “doble objetivo: por un lado la prevención de los hurtos en el transporte público y por otro la neutralización de los delincuentes con requerimientos judiciales o policiales pendientes o en situación irregular”.
REPARTO DE TAREAS
Por una parte, los Mossos intervinieron “para prevenir la delincuencia común, garantizar la seguridad ciudadana y el orden público, localizando a delincuentes habituales”. De otro lado “la Policía Nacional ejerció sus competencias en materia de extranjería, comprobando la situación administrativa de los identificados y si procede incoar los correspondientes expedientes de expulsión”.
En el operativo participaron agentes de la Policía Nacional conjuntamente con agentes de los Mossos, que contaron con la colaboración y cooperación del Centro de Seguridad y Protección Civil de TMB Metro de Barcelona.
El cuerpo de seguridad dependiente del Ministerio del Interior explicó que en la capital catalana “ha participado y participa en otros dispositivos de seguridad ciudadana y en investigaciones criminales en el ámbito de sus competencias, tales como el dispositivo del barrio de la Mina, en el frente Marítimo de Barcelona o como en los operativos contra los narco-lateros o el del Instituto Merlín, entre otros”.
(SERVIMEDIA)
