Con una masa de consistencia perfecta y con un relleno delicioso, la empanada chilena se abre pasó como uno de los platos favoritos de todo aquel que busca desayunar o comer un plato rico, y aunque tiene ciertas similitudes con las empanadillas, tiene en realidad un sabor único y diferente qué les ha hecho ganar muy buena fama. La preparación de la empanada chilena no es para nada complicado y de hecho basta conseguir un sencillo paso a paso para que prepares una masa perfecta y un relleno conocido también como pino, que levantará suspiros entre los comensales.
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Ingredientes que necesitas para preparar la masa de la empanada chilena
Si alguna vez has preparado masa de empanadillas caseras, la preparación de la masa de empanada chilena te parecerá sumamente sencilla, ya que en realidad utilizarás ingredientes muy similares a los que se necesitan normalmente.
Los ingredientes que vas a necesitar para preparar esta masa son: 800 gramos de harina todo uso, 2 cucharaditas de levadura en polvo, 125 gramos de manteca de cerdo, una cucharadita de sal, 1 huevo y 500 ml de leche entera.
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Esto es lo que necesitas para preparar el relleno o pino de las empanadas chilenas
Seguramente estás familiarizado con una gran variedad de rellenos para las empanadillas tradicionales; sin embargo, el conocido también como pino, que es el relleno de la empanada chilena y se caracteriza por ser diferente a todos los rellenos que ya has probado. Con un sabor delicioso, una buena jugosidad y un toque dulzón qué añaden unas pasas, este relleno es único.
Para preparar el relleno de la empanada chilena auténtico, vas a necesitar: 500 gramos de carne picada de ternera, 2 cebollas grandes, una cucharadita de azúcar, 1 vasito de vino blanco, 5 cucharadas de aceite vegetal, 3 huevos cocidos, aceitunas, pasas, paprika, sal, pimienta negra recién molida y comino en polvo.
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Comienza a preparar el relleno o pino
Para que prepares una empanada chilena auténtica, lo primero que debes hacer es el relleno o pino, ya que esté debe dejarse en reposo durante toda la noche en la nevera para que los sabores se fusionen y resulten más deliciosos.
Lava muy bien las pasas y déjalas en remojo en agua tibia por un tiempo aproximado de una hora; de esta manera quedarán perfectamente hidratadas. Hecho esto escurre las pasas y reserva. Prepara un sofrito con la cebolla y cocínalo durante unos 20 minutos aproximadamente a fuego suave hasta que la misma resulte ponchada y traslúcida.
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Así se debe hacer un sofrito lleno de aroma y sabor para el relleno de la empanada chilena
La empanada chilena se caracteriza por tener un rico relleno de sabor dulzón que es el sello emblemático de este plato, para prepararlo, logrando que quede perfecto, el sofrito es un paso muy importante que debes llevar a cabo tal como té lo he señalado.
Cocinar todo durante 20 minutos y a fuego suave garantizará, que la cebolla liberé todo su sabor dulzón y que está quede tierna al momento de añadir el resto de ingredientes.
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Azúcar y vino los aliados para un sabor auténtico
El toque dulzón del relleno no solamente lo da la cebolla, que ha sido sufrida durante un largo tiempo; sino que también el azúcar y el vino eran aliados para dar a tu empanada chilena un sabor realmente auténtico.
Transcurridos los 20 minutos de cocción del sofrito, añade el azúcar y remueve constantemente. Mientras remueve, vierte de chorritos en chorrito el vino y luego salpimienta a tu gusto mientras añades también los condimentos.
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Así terminas de preparar el relleno para la empanada chilena
Una vez que termines de añadir los condimentos y que hayas salpimentado a tu gusto, puedes incorporar la carne para que se cocine a fuego medio, durante aproximadamente unos 7 a 10 minutos.
Sí, durante la cocción de la carne, observas qué está bota mucho líquido, espolvorea una cucharada de harina sobre el relleno de la empanada chilena y remueve muy bien para integrar la completamente. Apenas tengas listo el relleno, colócalo en un recipiente, cúbrelo con un papel film y lleva a la nevera para que repose durante toda la noche.
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Así debes comenzar a preparar los ingredientes para hacer la masa
Una vez que tengas el relleno de la empanada chilena reposando durante 12 horas en la nevera, puedes pasar a preparar la masa para entonces armarlas y pasar a cocinarlas.
Para comenzar coloca la harina sobre una mesa limpia y seca y forma un volcán, añade la sal y también la levadura y luego coloca justo en el centro la manteca tibia, la cual puedes calentar en el microondas o en una sartén.
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Cómo preparar la masa de la empanada chilena para que quede perfecta
Tras añadir la manteca a la harina, incorpora también el huevo y la leche tibia y comienza a integrar perfectamente los ingredientes, y a medida que lo mezclas, irás formando una masa que debe ir quedando homogénea hasta que se despegue de tus manos.
Amasa muy bien la masa y finalmente divídela en pequeñas bolas con las cuales debes formar los discos de masa, que deberán tener aproximadamente unos 25 cm de diámetro para que pueda tener el tamaño adecuado y tradicional de la empanada chilena.
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Cómo armar las empanadas chilenas
Una vez que tengas lista las bolas de masa, toma el rodillo y aplánalas hasta formar los discos. Con una cuchara toma un poco del relleno y colócalo sobre el disco de masa, coloca también una aceituna, algunas pasas y trozos de huevo duro.
Cuando tengas el disco con el relleno, dóblelo a la mitad, moja el borde de la masa y con tus dedos procede a doblar y cerrar formando un triple doble en los bordes de la empanada chilena.
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Así terminas de preparar este plato delicioso con sabor auténtico
A medida que vayas armando la empanada chilena, colócala sobre una bandeja con papel vegetal de manera organizada y sin llegar amontonarlas. Una vez que termines de colocar todas las empanadas chilenas sobre la bandeja, puedes proceder entonces a llevarla a hornear.
Introdúcela bandeja al horno precalentado a 180 °C y deja que se hornee durante 30 minutos aproximadamente. Una vez que observa es que lucen doraditas, píntalas con una mezcla de yema de huevo con dos cucharadas de leche. Déjalas un par de minutos, retíralas del horno y estarán listas para comer.
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