Porque los divorcios nunca son un buen momento para ninguna de las dos partes. Menos, si todavía hay niños pequeños de por medio. Pero muchos de nosotros, llevamos esta parte de nuestra vida en la intimidad, todo lo contrario a los famosos que siempre acaparan las revistas y demás publicaciones.
Hoy hacemos un repaso por los divorcios más explosivos y sonados de los famosos. Aquellos que han dado mucho de qué hablar y que se convirtieron en el foco de la polémica. Seguro que algunos de los mismos te van a sonar y mucho. ¡Descúbrelo por ti mismo!.
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Alba Carrillo y Feliciano López
Uno de los divorcios más sonados de todos los tiempos, es éste. Alba Carrillo no se ha dejado nada en el tintero. Sin duda, hoy en día todavía lanza dardos contra el que fue su marido. Es cierto que el matrimonio duró muy poco tiempo, pero aún así, la parte del divorcio parece que se ha hecho más extensa, debido a sus declaraciones en televisión.
Alba dijo en alguna ocasión: «He llegado a sentir asco por él…». Alba relataba cómo la relación estaba muerta desde el minuto uno y que no la hizo sentir valorada ni querida. Las graves acusaciones por parte de la modelo hacia el tenista, ha acaparado numerosos programas de televisión, así como portadas de revista. Ahora, poco a poco, todo parece volver a la normalidad.
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Johnny Depp y Amber Heard
Otro de los divorcios de los que se ha hablado en los últimos años, es el protagonizado por el actor Johnny Depp y Amber Heard. Ella quería un acuerdo de divorcio de unos siete millones de dólares. Ése dinero iba a ser donado a obras de caridad. Parece que finalmente así se hará. Para ello, Amber retiró una denuncia por violencia de género.
Heard había solicitado el divorcio por ‘diferencias irreconciliables’. Pero poco a poco fueron saliendo informaciones que le dieron mucha vuelta al asunto. Presuntamente, también había vídeos donde el cabreo del actor era más que evidente y donde el miedo de ella era notable. Finalmente, el divorcio tuvo lugar y es otra parte de sus vidas que se cierra.
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Seal y Heidi Klum
Otro de los divorcios que tampoco dejó a nadie indiferente fue el de Seal con Heidi Klum. En las apariciones públicas, la modelo y el cantante siempre se dejaban ver de lo más acaramelados. Pero lo que vivían en sus casas no siempre corresponde con lo que vemos sobre las alfombras rojas.
De ahí que parece ser que el carácter de Seal ha sido uno de los detonantes. Heidi no podía soportarlo más y hasta estaba afectando a la convivencia con sus hijos. Aunque por otro lado, Seal ha llegado a afirmar que la infidelidad por parte de Heidi había sido otra parte principal en dicha separación. ¡Siempre habrá versiones para todos los gustos!:
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Harrison Ford y Melissa Mathison
En este caso, hablamos de otro de los divorcios más sonados y desde luego, más millonarios. Fueron casi 20 años los que Harrison Ford estuvo al lado de su mujer Melissa. Por lo tanto, todos los ingresos que se sumaron en toda esa época, había que intentar solucionar y vaya que si lo hicieron.
Porque al actor le costó unos 72 millones de euros esta separación. No había un acuerdo pre-matrimonial, por lo que la ex de Ford recibió unos 12 millones de manera directa pero el resto, iba en ciertas propiedades o inmuebles que la pareja tenía durante su matrimonio. Parece que la guionista Melissa no salió nada mal parada.
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Divorcios de Mel Gibson
Si es que en este caso, no podemos hablar de uno solo. El actor Mel Gibson ha estado casado con Robyn Moore más de 31 años y siete hijos, se convirtió en otro que dio mucho de qué hablar. También es cierto que es otro de los más caros del panorama nacional. Pero sin aprender del todo, Gibson volvió a tener problemas judiciales.
En este caso, no por matrimonio pero sí por una pareja. Tuvieron una hija en común y Oskana Grigorieva lo llevó a los tribunales, mientras el actor era acusado de supuestos malos tratos. Oskana obtuvo unos 500.000 dólares por la confidencialidad, pero parece que ella ha hablado de más, así que la cantidad no será tan alta.
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Paul McCartney y Heather Mills
Sin duda, otro de los divorcios más comentados ha sido éste. El ex-Beatle, Paul McCartney reconoció que el haberse casado con Heather había sido uno de los grandes errores en su vida. Aunque sin duda, la boda fue de lo más romántica y comenzó entonando la canción, ‘All you need is love’. Aunque parece que el amor no tardó en romperse.
A pesar de ello, Paul siempre ha visto el lado positivo y en este caso, sería su hija. Parece ser que el acuerdo, para que el divorcio se llevara a cabo sería de unos casi 27 millones de euros. Ella lo acusó, en su momento, de ser presuntamente maltratador y de alcohólico. Tras cobrar el dinero, Mills se alquiló un isla para poder celebrar que ya estaba divorciada del músico.
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Madonna y Guy Ritchie
Madonna es la reina del pop de manera indiscutible. Aunque también su vida privada ha estado muy presente en cada época de la misma. Pero sí es cierto que hubo un lado un tanto más oscuro que desembocó en una relación tormentosa. No fue otra sino la que tuvo con su ex-marido, Guy Ritchie. Lo que parecía un amor más que perfecto, se convirtió también en pesadilla.
Según parece, tenían grandes peleas en las que él le llamaba fea y también gorda. Parece que a ella lo que le gustaba era un hombre que fuese más ambicioso y Guy no lo era. Su divorcio fue, y sigue siendo, la dura lucha por la custodia de su hijo en común. Además de tener que haber pagado una alta cantidad de millones. Parece que la diva del pop aprendió bien la lección.
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Tiger Woods y Elin Nordegren
En este caso, se trata de uno de los divorcios más caros del mundo del deporte. Sin duda, seguro que lo recuerdas y bastante. Tiger Woods también tuvo que sentarse frente a su mujer para aclarar las cosas. Unas cosas que venían de las infidelidades del deportista. Por lo que su mujer no pudo más y terminó pidiéndole el divorcio.
Aunque para que no saliera nada de ello a la luz, el dinero siempre de por medio. Ella firmó el acuerdo de confidencialidad. Así, todas las cosas íntimas se quedarían en un segundo plano y seguirían siendo íntimas. A cambio de todo ello, se llevó una cantidad nada despreciable de 750 millones de dólares.
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