En el Real Madrid las cosas se mueven de forma lenta en un mercado de fichajes en el que casi no ha hecho movimientos para reforzarse. Los merengues se han dedicado más en las salidas de piezas claves, en las que Zinedine Zidane, Sergio Ramos y Raphael Varane figuran como las más importantes, que en la búsqueda de esos fichajes de relumbrón que realcen el nivel de la plantilla de cara a este curso. La llegada de David Alaba, sumada a los cedidos que regresan, no parece ser el espaldarazo suficiente ni esa revolución que prometió Florentino Pérez tras una de las peores campañas que se recuerden del equipo blanco. Aunque se aprecia el esfuerzo y el orgullo que mostraron los jugadores, para llegar con vida a la última jornada de Liga y a la semifinal de Champions League; la realidad es que no ganaron ni un solo título.
Tras una temporada sin trofeos, por supuesto que esta debe ser catalogada como un fracaso para el Real Madrid; ante ese hecho se pensaba que se realizarían los fichajes necesarios para, no solo recobrar la fe en el equipo, sino también hacerlo más fuerte de cara a una temporada que se presume será muy difícil. Si bien el equipo se ha debilitado en defensa, el grave problema que hereda Carlo Ancelotti sigue siendo la falta de gol; en ese sentido la ausencia de Cristiano Ronaldo sigue pesando como una roca imposible de cargar. Karim Benzema ha dado un paso al frente y a pesar de marcar 30 goles, con su aporte no ha sido suficiente; por eso se cree que con jugador que logre aportar al menos 15 goles se daría un gran cambio y eso es precisamente lo que se quiere lograr con Gareth Bale.
Bale es la nueva arma goleadora del Madrid
Obviamente que la cantidad de goles que aportaba Cristiano Ronaldo será imposible de igualar; pero con el estado de forma actual de Benzema y con un jugador que logre sumar al menos unos 15 tantos, las cosas podrían ser mucho mejor para un Real Madrid al que el tema de la falta de gol le ha hecho decaer mucho en su efectividad y también a la hora de obtener triunfos. Claro está que la apuesta de los blancos sería fichar a Kylian Mbappé, por el que el mandatario blanco tenían un buen plan trazado; no obstante la negativa del PSG a sentarse a negociar hace difícil que ahora se pueda contar con él. Por supuesto que el francés aportaría más de 15 goles, la cuestión es que sin él en la ecuación cualquier aporte sería invaluable y allí entraría la figura de un Bale en el que Ancelotti confía.
El galés tardó en ganarse a Mourinho la temporada pasada cuando estuvo cedido al Tottenham; incluso el portugués llegó a perder la fe, pero cuando tuvo algunos minutos este pudo destacar en una de las facetas por las que más brilla: su olfato goleador. En solo 34 partidos jugados, el galés pudo marcar 16 goles y realizar tres asistencias; una cantidad impresionante para un futbolistas que no era titular indiscutible y que buena parte de esos partidos no los comenzó como titular. Sin embargo, con esa cantidad tuvo un mejor balance goleador que los segundos que marcaron más tantos en el Real Madrid; Casermiro y Asensio, ambos con siete goles. La cifra aumenta su valor si se tiene en cuenta que los dos madridistas jugaron muchos más duelos que Bale; así que realmente hay mucha fe en que pueda repetir esa cantidad esta temporada.
Una última oportunidad para brillar
Pese a que la permanencia de Bale en el Real Madrid se intuía casi imposible con Zidane, la llegada de Ancelotti dio algo de esperanza; sin embargo, lo que ha terminado de dar la certeza de que el galés permanecerá en el equipo es esa confianza plena que el entrenador italiano tiene puesta en él. Desde la afición a la prensa muchos ponen en duda el compromiso de Bale con la entidad merengue, pero el caso es que el entrenador blanco no tiene dudas de que el extremo puede dar mucho de sí cuando tiene la confianza de su estratega y eso es precisamente lo que él quiere darle. Al momento de regresar Ancelotti no dudo en afirmar que jugadores como el galés tendrían la oportunidad de mostrar su valía y es que a estas alturas, con algunos entrenamientos, parece que el jugador se perfila como titular.
La banda derecha sería su lugar y Ancelotti le quiere darle eso voto de fe que lo haga corresponderle de la misma forma. El italiano es consciente de que ya no será el sucesor de Cristiano Ronaldo, pero si que puede aportar esos goles que tanta falta hicieron en varios partidos la temporada pasada. Su magia goleadora será bien recibida por su entrenador, que espera que se esa calidad eleve el potencial de ataque del equipo y lo haga mucho más fuerte ante todos. Su regreso se tenía como una salida segura y ahora puede ser ese «fichaje» a coste cero que se convierta en el gol que tanta falta hace. En su última campaña como merengue parece que quiere hacerlo bien y Ancelotti espera exprimir hasta la última gota de calidad que le queda y en esa misión trabajará durante esta temporada.
