Los antisépticos son sustancias químicas que normalmente se aplican de forma tópica sobre la piel intacta, las mucosas o las heridas, para eliminar la población de microorganismos vivos en dichos tejidos y los más usados en la práctica clínica habitual son los alcoholes, los compuestos yodados y la clorhexidina.
Tipos de antisépticos
- Alcoholes: Entre sus 3clasificaciones que son etílico, propílico e isopropílico, Sus aplicaciones en la piel son seguras y poseen un tiempo prolongado de manifestación de daño microbiano con una concentración más usada a nivel comercial, es la de 70 % y produce menos resequedad e irritación en la dermis.
- Yodo: Esta sustancia de acción rápida; puede perdurar por hasta 2 horas. Se utiliza para la preparación de la dermis antes de realizarse una intervención quirúrgica o punciones pero con una desventaja clave que puede irritar la piel u ocasionar una quemadura química por permanecer un largo período en la piel.
- Peróxido de hidrógeno: Conocido por su nombre vulgar y comercial ‘’agua oxigenada’’ se usa frecuentemente para la limpieza de mucosas y combatir la gingivitis. Su aplicación es muy extendida ya que no produce irritación en la zona a tratar.
- Povidona yodada: Es una sustancia soluble en agua combinada con yodo y povidona que permite una acción desinfectante que dependerá de la cantidad de yodo que tenga concentrada. Es muy efectivo contra bacterias, virus, hongos, quistes, esporas, amebas y protozoos. Puede aplicarse sobre mucosas o en los alrededores del área lesionada de la piel y puede ocasionar irritaciones en la piel y manchas. Provoca menos irritación que las concentraciones de yodo puro.
- Clorhexidina: Se trata de una sustancia química de acción intermedia, con una larga duración de protección contra diversos tipos de bacterias. Su absorción es leve y no es perjudicial a excepción del área de los ojos y oídos. Cabe resaltar que tiene acción antiviral contra algunos virus, como la influenza.
- Triclosán: Es un derivado fenólico de acción intermedia presente en muchos productos que se usan para el lavado de las manos en clínicas. Debido a su rápida absorción en la piel, demuestra su eficacia contra las bacterias, perjudicando sus paredes celulares.
- Nitrato de plata: Es un compuesto muy potente para combatir estafilococos y pseudonomas; bacterias comunes en los hospitales. También se usa para tratar verrugas y quemaduras.
- Cloruro de benzalconio: Este compuesto puede encontrarse en tinturas o soluciones acuosas. Se aplica para desinfectar una herida, mucosas, o piel sana. La dermis debe ser lavada cautelosamente con abundante agua, ya que puede propiciar al incremento de los microorganismos. En raras ocasiones, puede causar reacciones alérgicas.
- Cloroxilenol: Es un desinfectante y antiséptico. Se aplica en heridas y lesiones cutáneas. Además de que, puede usarse para desinfectar instrumentos.
- Etanol: Sustancia con propiedades bactericidas, se aplica en la piel antes de inyectar o realizarse una cirugía.
- Merbromina: Este producto contiene mercurio, lo cual es altamente toxico. Se presenta en menor medida combinado con otras sustancias para desinfectar la piel. Se utiliza para tratar bacterias y hongos.
Usos referenciales del antiséptico
Para luchar contra las infecciones quirúrgicas que realmente comenzaron en la segunda mitad del siglo XIX, cuando el médico John Lister publicó un artículo en el que describía su método de tratamiento de la fractura abierta con una solución de ácido fénico al 5%. Desde entonces, una nueva era en la cirugía, donde el desarrollo de la medicina hay nuevos tipos de antisépticos.
Propósitos
Antiséptico en términos modernos significa un conjunto de medidas y la manipulación, el propósito de los cuales es para destruir los microorganismos y sus esporas y toxinas en los tejidos y macroorganismos.
Junto con estos métodos es de gran importancia, el término «aséptica«, lo que significa un conjunto de medidas para prevenir el desarrollo de bacterias patógenas en las heridas y dichas técnicas asépticas también incluyen la esterilización de instrumentos y accesorios quirúrgicos.
Así como el descubrimiento de los grupos de anestesia y de la sangre, la cirugía abierta en los tipos de aséptica y antiséptico se convierte en uno de los avances médicos básicos de la época del siglo XIX. Dado que los cirujanos de tiempo se han vuelto cada vez más considera una práctica de riesgo en las operaciones en el tórax y el abdomen.
Alcoholes
Los alcoholes (etílico e isopropílico) son compuestos orgánicos del agua, usados históricamente en medicina como antisépticos de limpieza y desinfección de heridas. Además de su actividad antimicrobiana, son un buen solvente de otros productos, como muchos antisépticos y desinfectantes, que potencian tal actividad. Los alcoholes habitualmente usados son alcohol etílico o etanol y alcohol isopropílico.
Las concentraciones varían entre 70 y 96% para el primero y entre 70 y 100% para el segundo. Aunque sus aplicaciones son idénticas, se suele usar habitualmente el etanol por ser el menos irritante. Con ellos se puede hacer gel desinfectante para manos.
Mecanismo de acción
Los alcoholes actúan destruyendo la membrana celular, por reducción de su tensión superficial, y desnaturalizando las proteínas. Su eficacia está basada en la presencia de agua, ya que así penetra mejor en las células y bacterias permitiendo el daño a la membrana y rápida desnaturalización de las proteínas, con la consiguiente interferencia con el metabolismo y lisis celular.
Su acción es rápida, incluso desde los 15 segundos, principalmente en concentraciones de 70% que permite su mejor penetración en el protoplasma bacteriano. Sus efectos biológicos de daño microbiano son mayormente breves, pero pueden permanecen por varias horas.
Espectro de acción
Los alcoholes poseen una acción rápida y de amplio espectro, actuando sobre bacterias gramnegativas y grampositivas, incluyendo micobacterias, hongos y virus como hepatitis B y VIH, pero no son esporicidas. Este efecto es reversible. Dado su nulo efecto esporicida, los alcoholes no se recomiendan para esterilización, pero sí son habitualmente usados para desinfección de superficies o antisepsis de la piel.
Bajas concentraciones pueden ser usadas como preservantes y para potenciar la actividad de otros biocidas. En general, el alcohol isopropílico es considerado más efectivo como bactericida, y el etílico más potente como virucida. Esto es dependiente de la concentración de ambos agentes activos. El etanol al 70% destruye alrededor de 90% de las bacterias cutáneas en dos minutos, siempre que la piel se mantenga en contacto con el alcohol sin secarlo. Los alcoholes se inactivan en presencia de materia orgánica.
