Alguna vez, todos, por casualidad, hemos estado presentes, no en una sesión de espiritismo, pero sí en la antesala de: ¿y si lo probamos? Algunos hicimos una prueba cutre en el colegio, con un anillo, una ouija hecha con papel y boli y muchos nervios. Pero puede que a veces se nos vaya de las manos, y por eso te vamos a mostrar diez casos sorprendentes que pasaron con la ouija.
[nextpage title="Estefanía Gutiérrez"]

6Espíritus buenos
Una de las preguntas qué más se suele hacer cuando se empieza una sesión, es si el espíritu es bueno o malo. Es una pregunta controvertida, y no sabemos hasta qué punto -si es cierto todo esto- un espíritu miente, o no.
En cualquier caso, uno de los sucesos más sonados en Venezuela fue el de una chica de dieciocho años, llamada Andrea, que perdió a su madre tres años antes de hacer la sesión. Cuando hicieron todo tipo de preguntas, todas tenían la misma respuesta: "Andrea".
Terminaron la sesión, y la chica en concreto terminó notando esa presencia durante varios días. Al final les dijo a las chicas que efectivamente, creía que era su madre, pues cuando vivía era una mujer bastante posesiva a la que no le gustaba que su hija estuviera con otras personas.
[nextpage title="Otra predicción"]





