Una de las victimas favoritas de Cristiano Ronaldo en toda su carrera es sin duda alguna el Atlético de Madrid. Contra el máximo rival en la capital española tiene un total de 25 goles anotados, toda una barbaridad. Además, hay que tener en cuenta que 22 de esos tantos los realizó con la camiseta del Real Madrid; lo que lo coloca como el máximo goleador en la historia de los derbis madrileños. Con goles de todos los colores, el portugués se ha lucido en múltiples ocasiones frente a los colchoneros; con lo que certifica un idilio amoroso con el gol cada vez que los tiene delante.
A lo largo de su carrera se ha podido medir ante grandes rivales; sin embargo, si es el Atlético el que tiene al frente se activa un poder especial en el luso que lo hace jugar mucho mejor. Los goles no son lo único que despliega, porque en su arsenal figuran grandes partidos; pero es que han sido tantas dianas que esas son las que quedan en el recuerdo de los aficionados. Las humillaciones a los rojiblancos han sido muchas, al punto de varios de sus goles se pueden colocar como los mejores que se han hecho en los derbis de Madrid; aunque siempre saldrán a relucir esos momentos en los que robo el show por completo.
2Otro golazo casi desde su casa
En la campaña 2012-2013, el Real Madrid venía de ser campeón de Liga; pero eso no le estaba sirviendo en una temporada que no comenzó tan bien para los entrenados por José Mourinho. En ese momento estaban a ocho puntos de distancia debajo de su rival citadino y en la jornada 14 se enfrentaron para dirimir si los blancos se despedían del torneo antes del final de año podrían resucitar un poco, con Cristiano Ronaldo en cancha pasó lo segundo.
Todo el ambiente tenso que se creo al principio y esa superioridad que supuestamente tenían los del Atlético quedó en nada cuando un zapatazo de tiro libre del portugués apagó cualquier atisbo de rebelión por parte de los rojiblancos. El tanto fue espectacular debido a que sirvió para abrir el marcador, por el golpeo tan preciso y por la distancia que había de la portería; al final, la cara de impresión de Casillas es la que le quedó a todos los asistentes al estadio y a los que lo observaron por televisión, después de ver semejante obra de arte. Un golazo que condujo al triunfo y a unos tres puntos muy valiosos.
