La policía del Reino Unido ha puesto en marcha una curiosa iniciativa para controlar a los conductores sin que éstos se percaten de su presencia.
Camuflados entre los pasajeros de un autobús, dos agentes anotan las matrículas y denuncian por radio a aquellos conductores que cometan algún tipo de infracción.
Los oficiales Johnson y Mitchel fueron grabados mientras controlaban que los conductores no utilizaran sus teléfonos móviles mientras estaban circulando por la carretera.
Desde sus asientos del autobús, los oficiales denunciaron a nueve conductores.
Una vez hayan presenciado una falta, los policías contactan con los agentes de tráfico para multar al denunciado.
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Catching the bus – to catch people breaking the law in their cars
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— BBC News (UK) (@BBCNews) 30 de abril de 2019
