El portavoz del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en el Congreso de los Diputados, Patxi López, ha expresado su determinación por llegar a un acuerdo con el Partido Popular (PP) para reformar la Ley de Extranjería. López señala que están dispuestos a «buscar hasta el último minuto» el apoyo de los ‘populares’ para que el reparto de menores migrantes no acompañados entre las comunidades autónomas sea obligatorio.
Según López, la cuestión se reduce a si el PP acepta o no la reubicación de estos menores que «han escapado de sus países por hambre, por guerras y para poder sobrevivir». El portavoz socialista considera inaceptable que el PP no apoye una ley de estas características, especialmente cuando el Partido Popular de Canarias está animando a la reforma.
La Posición de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC)
Por otro lado, Patxi López ha rechazado la posición del Govern catalán, liderado por ERC, que en la víspera rechazó el reparto de menores migrantes no acompañados entre las comunidades autónomas. López señala que ERC «se lo tendrá que explicar a la ciudadanía catalana, que es mucho más solidaria que la posición de su gobierno.
Esto se enmarca en las negociaciones que el PSOE está llevando a cabo con ERC para la investidura del líder del Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC), Salvador Illa, como nuevo presidente de Cataluña.
La Competición por la Insolidaridad
Según el PSOE, se está produciendo una «competición» entre el PP y Vox por ver quién es más «insolidario» con las comunidades autónomas fronterizas que reciben la mayor parte de los inmigrantes irregulares.
El Gobierno ha tendido la mano al PP para reformar la Ley de Extranjería y convertir el reparto de migrantes entre las comunidades en algo obligatorio. Los socialistas consideran que esta es una oportunidad para que el PP rompa con Vox y apoye esta ley, que debería ser una cuestión de humanidad, dejando de lado los «cálculos políticos».
En resumen, el PSOE está determinado a lograr un acuerdo con el PP para reformar la Ley de Extranjería y asegurar un reparto equitativo de los menores migrantes no acompañados entre las comunidades autónomas. Mientras tanto, se critica la posición del Govern catalán liderado por ERC y se acusa al PP y a Vox de mantener una «competición por la insolidaridad».
