El Partido Animalista PACMA ha formalizado su demanda contra el Toro Júbilo de Medinaceli (Soria) con el argumento jurídico de que «el único toro embolado que se celebra aún en Castilla y León» carece de base legal para poder seguir celebrándose porque carece de la catalogación como «espectáculo taurino tradicional».
Entre los argumentos plasmados en la demanda, la asesora jurídica del partido animalista, Eva Ramos, destaca la modificación de la Ordenanza reguladora del festejo aprobada por el Ayuntamiento de Medinaceli en 2015, tras la que el Consistorio «no habría seguido el procedimiento legalmente establecido en el Reglamento taurino de Castilla y León».
Según ha explicado PACMA, poder mantener la declaración de espectáculo taurino tradicional es preceptivo que los ayuntamientos presenten a la Junta cualquier modificación de las bases reguladoras para que la Administración autonómica de su conformidad mediante una Orden, algo que, según insiste la formación animalista, no se produjo.
Otro de los fundamentos de la demanda se basa en la muerte del toro utilizado en 2022 que, a criterio de PACMA, no se habría adaptado al Decreto de 2016 por el que el Gobierno autonómico prohibió la muerte de los toros en público.
«Estos cruentos festejos deberían estar prohibidos desde hace tiempo, pero, la realidad es que, mientras no tengamos gobiernos verdaderamente comprometidos contra el maltrato animal, no nos queda otra que seguir dedicando mucho tiempo y recursos a acabar con ellos, uno a uno, ante los tribunales», ha concluido Cristina García, abogada y vicepresidenta de PACMA.
Y ha mostrado su confianza en que la magistrada estudie detenidamente los argumentos y pruebas de PACMA y les dé la razón, «lo que comprometería seriamente que el espectáculo pudiera volver a celebrarse en el futuro».
