Que las cabezas de cartel presentadas por el Sonorama Ribera para 2024 sean músicos en Español no es poca cosa. El festival que llega a los 27 años intentando evitar la suerte de los músicos de rock y seguir viviendo. Aun en esta realidad, el festival ha tomado dos decisiones que pueden preocupar desde fuera, apostar de nuevo por una mayoría de músicos del país, y además reducir el total de entradas hasta un punto donde el festival sea sostenible y atractivo en partes iguales.
Álvaro de Luna, El Kanka, Juancho Marqués, La Habitación Roja, Macaco, Maikel Delacalle, Mikel Izal, Natos y Waor, OBK, Queralt Lahoz, Rayden, Rozalén, Shego, Shinova, Sidecars o Travis Birds son algunos de los muchos artistas que pasarán por la 27.ª edición del festival.
Este año el Sonorama Ribera 2024 se celebrará los días 7, 8, 9, 10 y 11 de agosto, y, a diferencia de otras ediciones, el miércoles 7 el festival transcurrirá durante todo el día, mientras que el domingo 11 la programación será exclusivamente matinal y gratuita. Es una muestra de esa decisión doble de crecer, pero mantener las características que lo separan de algunos de sus competidores. En palabras del director del festival, Javier Ajenjo, en la presentación del cartel: «En España no sobran festivales, sobran los malos festivales».
El otro punto diferenciador sigue siendo el precio. En los últimos 10 años la entrada se ha mantenido al mismo monto y como siempre estarán disponibles el 4 de diciembre a las 12:00 horas y saldrán en tres tramos, 20.000 bonos y 1.000 bonos VIP: saldrán los 2.000 primeros bonos a 75€ y gastos de gestión; los 2.000 bonos siguientes a 80€ y gastos de gestión los 16.000 restantes a 85€ y gastos de gestión.
Ese total de 20.000 bonos es además una noticia llamativa. Mientras que sus competidores intentan seguir creciendo, el Sonorama apuesta por reducirse para ser más atractivo. Seguramente, a sabiendas de que para cualquier festival es preferible que sus asistentes puedan moverse y consumir en los espacios de restauración, la apuesta es que, en efecto, tengan esa posibilidad. Es una lección que otros festivales, como el Mad Cool, aprendieron por las malas en 2023.
Otra gran novedad del festival es que este año dispondrá de dos zonas de acampada, con mejoras notorias en su espacio y un precio de 20€ y gastos de gestión para todos los días del evento.
SONORAMA RIBERA: OTRA APUESTA POR LA SOSTENIBILIDAD
El otro punto, además de la esperada emoción por el cartel, que defendió Ajenjo, fue su compromiso por la sostenibilidad. Es un punto que señalaron como clave, subrayando los esfuerzos en sostenibilidad y en invertir en el recinto para que además pueda funcionar como espacio de ocio el resto del año. Para él, los datos de las emisiones de carbono que ofrecen todos los festivales no es suficiente, y en particular ha asegurado que el esfuerzo del festival pasa por el reciclaje.
Es un punto clave para que la música en vivo siga siendo un espacio importante en el desarrollo cultural. Si el planeta no puede aguantar, estos eventos no podrán realizarse. Ya varios artistas del mundo lo han señalado y los New Order han sido particularmente duros asegurando que si desde la industria no se toman medidas como las que presenta el Sonorama los gobiernos lo harán por ellos.
SONORAMA RIBERA PIEZA CLAVE DE ARANDA DEL DUERO
Para el pueblo de Aranda del Duero este festival es una pieza clave. Además de atraer 20.000 turistas y generar empleo, el festival es también una forma atraer ojos sobre los problemas de la zona. De hecho, el propio Ajenjo ha querido insistir en la necesidad de que la zona tenga servicios de tren. Es una apuesta más del Sonorama, ser un altavoz de su comunidad, algo de lo que otros festivales deberían tratar de aprender.
