Luis Rubiales se da por vencido: dimite como presidente de la RFEF y vicepresidente de la UEFA

En un giro sorprendente para el mundo del fútbol, Luis Rubiales, hasta ahora presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y vicepresidente de la UEFA, ha presentado su dimisión este domingo.

La noticia ha sido confirmada por Luis Rubiales a través de un comunicado publicado en su cuenta de la red social X (antes Twitter), donde también expresó su renuncia a la vicepresidencia de la UEFA.

Esta decisión ha sido tomada en medio de la polémica que envuelve al dirigente tras un beso no consentido a la jugadora de la selección española de fútbol femenino, Jenni Hermoso, y gestos obscenos durante la celebración de la final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda el pasado 20 de agosto.

Rubiales, en su comunicado, expresó: «Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo, ni a la Federación, ni al fútbol español». Esta declaración sugiere que el expresidente de la RFEF considera que su permanencia en el cargo no sería beneficiosa en medio de las acusaciones y controversias que lo rodean.

La crisis comenzó cuando la FIFA, el organismo rector del fútbol mundial, suspendió a Rubiales de sus funciones durante 90 días y le prohibió participar en cualquier actividad relacionada con el fútbol a nivel nacional e internacional. Además, se le impidió cualquier contacto con Jenni Hermoso para evitar presiones indebidas sobre la jugadora.

LUIS RUBIALES Y SUS FALTAS “GRAVES”

A principios de septiembre, el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) abrió un expediente contra Rubiales solo por falta grave, no por falta muy grave como se esperaba inicialmente. Esta decisión se basó en la información disponible en ese momento, que no permitía calificar el beso a Jenni Hermoso como abuso de poder.

Sin embargo, la situación se complicó aún más cuando la Fiscalía presentó una querella en la Audiencia Nacional contra Rubiales. La Fiscalía considera la posibilidad de un delito de agresión sexual y otro de coacciones, y formalizó la denuncia después de tomar el testimonio de la deportista internacional Jenni Hermoso en la sede de la Fiscalía General del Estado.

En su comunicado de dimisión, Rubiales insinuó la existencia de injerencias en su caso y mencionó «poderes fácticos que impedirán mi vuelta». Además, destacó el sufrimiento que ha experimentado su familia y seres queridos debido a lo que él describió como una «persecución desmedida» y «falsedades». Sin embargo, también afirmó que «en la calle, cada día más, la verdad se está imponiendo».

LAS REDES SOCIALES SALTAN CONTRA RUBIALES

Las redes sociales no han tardado en saltar y reaccionar ante esta noticia. Periodistas y políticos se han sumado a los miles de comentarios y reacciones sobre la salida “deseada”, para algunos, de Rubiales como presidente de la Federación Española de Fútbol.

Muchos usuarios de la red social ‘X’ culpan al expresidente de interponer en este asunto a sus hijas e incluso, de “utilizarlas” a su favor en este caso mediático.

La dimisión de Luis Rubiales marca un momento de incertidumbre en la RFEF y la UEFA, ya que ambos organismos deberán ahora buscar un nuevo liderazgo en un momento en que el fútbol español e internacional enfrenta importantes desafíos. La comunidad futbolística estará atenta a los próximos pasos que se tomen para llenar este vacío de poder y restaurar la estabilidad en el deporte rey.