En 1982 surgió en Francia una asociación llamada Les Plus Beaux Villages de France que podemos traducir como “los pueblos más bonitos de Francia”, su objetivo no era otro que el de promover el atractivo turístico de los pequeños pueblos franceses. En España, la Asociación Los Pueblos más Bonitos de España, siguió en el año 2011 el ejemplo francés. Son 94 los pueblos que forman parte de la asociación y que presumen de ser los más bonitos de nuestro país. Cualquiera de ellos son en realidad dignos de conocerse.
Pero quizás, en estos tiempos de pandemia en los que lo más aconsejable es evitar todo lo posible los lugares masificados, es importante resaltar aquellos pueblos más pequeños, que deben visitarse manteniendo todas las medidas de seguridad para preservar la salud de sus habitantes. Lugares y entornos mágicos en los que podremos pasear adaptando el paso tranquilo al transcurrir de su vida natural, huyendo del estrés y las prisas, sin más obligación que la de disfrutar.
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Ponte Maceira en A Coruña, Galicia uno de los pueblos más pequeños de nuestro país
Este es uno de los pueblos que podemos encontrar en A Coruña, pertenece en concreto al Concejo de Negreida y tiene solo 27 habitantes y se localiza a 21 kilómetros de Santiago de Compostela. a 229 metros sobre el nivel marino. Es un entorno por el que pasan los peregrinos que ya están a punto de culminar su viaje a la catedral del apóstol Santiago.
Un pueblo donde las casas son de piedra con balcones colgantes y se ven recubiertas por el verde de la vegetación. Uno de los antiguos molinos ha sido transformado en restaurante para deleite de los visitantes. Pero el verdadero orgullo de sus habitantes nace de su puente medieval de seis arcos de medio punto y el central apuntado, que se construyó con sillares de granito, sillarejo y mampostería en el siglo XIII, y fue posteriormente reformado en el XVIII. También se puede visitar el Pazo de Baladrón con su palomar, sus perreras y hórreos recuperados. Y los que quieran disfrutar de un paseo por el entorno de uno de los pueblos más bonitos de Galicia pueden hacer la ruta circular de senderismo A Ponte Maceira, de 16 kilómetros.
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Mogrovejo en Cantabria, uno de los pueblos que se encuentran al abrigo de los Picos de Europa
Mogrovejo pertenece al municipio cántabro de Camaleno, es un pueblo que nació en el medievo, en el s. XIII. Tiene una población fija de unos 44 habitantes. Ya en el año 1985 fue declarado Bien de Interés Cultural y Conjunto Histórico-Artístico. En el pueblo encontramos bien conservadas tanto las viviendas que pertenecían a los nobles de la zona, que se caracterizan por sus entradas monumentales y sus altos muros con otras típicas de la arquitectura popular, las casas lebaniegas hechas con estructuras de barro y varas.
Como curiosidad, en los alrededores de Mogrovejo se rodó en el año 2016 la película Heidi: Queen of the Mountain. Los Mogrovejo eran unos condes ilustres de Cantabria, podemos visitar su casa señorial y también la torre del s. XIII. Hay numerosas rutas para los que gusten de perderse paseando por la zona. Y cerca se encuentra el monasterios de Santo Toribio de Liébana y también el famoso pueblo de Potes.
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Bárcena Mayor en Cantabria
Sin cambiar de comunidad, podemos visitar también este pueblo de menos de cien habitantes que se localiza en el Valle del Saja en Bárcena Mayor. Es uno de esos pueblos de ambiente bucólico que se caracterizan por los balcones de madera y las calles de piedras adornadas con flores. También sus orígenes son de época medieval y el entramado de sus calles se mantiene desde el s. XVII. Bárcena Mayor fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1979. Paseando por sus calles encontraremos numerosas tiendas de artesanía popular especializadas en utensilios de cocina elaborados en mimbre y madera..
Entre los lugares de visita obligada en este pueblo están la Casa Rectoral del siglo XVIII, al Puente sobre el río Argoza, del siglo XVI, y a la Iglesia de Santa María, del siglo XVII. En sus alrededores se puede practicar el senderismo y también hacer excursiones en bicicleta.
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Castrillo de los Polvazares en León, otro de los pueblos por los que pasan los peregrinos a Santiago
También tiene menos de cien habitantes fijos el pueblo de Castrillo de los Polvazares, que se encuentra en la comarca de la Maragatería, siendo uno de los municipios de Astorga. Antiguamente era un pueblo de comerciantes arrieros, hoy en día vive del turismo, especialmente de aquellos que se deciden a probar in situ el famosos cocido maragato un plato que se empieza consumiendo la carne y se acaba con la sopa, al contrario de lo que ocurre con la mayoría de cocidos.
Este es otro de los pueblos que ha sido declarado Conjunto Histórico Artístico en el 1980. Sus calles de piedra se flanquean por casas de fachada sobria que se caracterizan por no tener casi ventanas para evitar el frío y por sus grandes puertas por las que tenían que pasar los carros a los patios interiores que se rodeaban de bodegas.
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Viniegra de Arriba en La Rioja
Este pequeño pueblo tiene una población fija que no llega a los 40 habitantes. Forma parte de las llamadas Siete Villas que son Viniegra de Abajo, Ventrosa, Brieva, Mansilla, Villavelayo y Canales. Se trata de un conjunto de municipios en los que la historia y la naturaleza se dan la mano a través de edificios históricos, calles de piedra y un entorno con un paisaje de cuento. Viniegra de Arriba se encuentra rodeado de Sierras cuyos picos alcanzan más de 2000 metros de altitud.
En su casco urbano destacan el Ayuntamiento, la Torre del Reloj, la Fuente de los Tres Caños, la Iglesia de la Asunción y la Ermita de la Magdalena de origen románico. Los habitantes de la zona son llamados noguerones por los muchos nogales que se encuentran alrededor del pueblo. Sin duda un lugar por el que pasear nos retrotraerá a la época medieval.
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