Los regantes reprochan al Gobierno la ejecución de sólo 2 de cada 10 euros de la inversión hidrológica

La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (FENACORE) ha reprochado al gobierno haber ejecutado sólo 2 de cada 10 euros de la inversión prevista en los anteriores planes hidrológicos durante la intervención de su presidente, Andrés del Campo, en el desarrollo de la jornada organizada por Seopan sobre el sector del agua en España.

Además, ha explicado que el «agujero» en la inversión se debe a que cerca de 1 millón de hectáreas siguen pendientes de modernizarse y de que un porcentaje «elevado» de obras de regulación y de infraestructuras hidráulicas no se hayan realizado, a pesar de recogerse en planes y ser determinantes para reducir los impactos del cambio climático, como inundaciones y sequías.

La organización asegura que la «reprimenda» se ha remitido al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en un alegato que formulan los regantes sobre la nueva planificación hidrológica, que prevé que se apruebe en primavera tras expirar el periodo para formular alegaciones el próximo 23 de diciembre.

Así, Fenacore indica que en los 25 Planes Hidrológicos revisados en el segundo ciclo, del 2015 al 2021, se incluían 11.224 medidas y una inversión prevista de más de 22.000 millones de euros.

No obstante, informa que con los datos disponibles, hasta diciembre de 2018 solamente se finalizaron el 7 por ciento de las medidas, con una inversión ejecutada de 3.650 millones de euros, cerca del 16 por ciento, «cuando el periodo transcurrido superaba el ecuador temporal del plan».

«LA PLANIFICACIÓN HIDROLÓGICA ESTÁ DESENFOCADA»

La organización apunta a una falta de inversión como uno de los motivos que hacen que «la planificación hidrológica está desenfocada» ya que se antepone «el extremismo ecologista» al agua que plantea «la amenaza de no tener suficiente agua para regar durante los próximos años».

Igualmente, recuerda como este peligro se trasladó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una carta en la cual se expresaba «el malestar del campo» por la «discriminación» que sufre el regadío en la agenda política, cuya respuesta fue una serie de reuniones de los regantes de las Confederaciones Hidrográficas con la Dirección General del Agua del MITECO para que su resultado marque la decisión de la Junta Directiva de Fenacore en relación a distintas movilizaciones anunciadas por organizaciones agrarias.

Por último, los regantes «confían» en que dichos encuentros «den sus frutos» y colaboren para enmendar la planificación, ya que se ha comprobado la voluntad por llegar a acuerdos.

Del Campo lamenta que las infraestructuras hidráulicas «son las grandes olvidadas» en la agenda política, que además sufren «un agujero en la inversión que, paradójicamente, compromete los objetivos del MITECO en cuanto a la lucha contra el cambio climático o la despoblación de las zonas rurales».