El FNSSE supondrá un ahorro del 14% en la factura eléctrica de los hogares en 2026

El Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE) supondrá un ahorro del 14% en la factura eléctrica para los consumidores domésticos en 2026, es decir, en su primer año de total aplicación, según el informe «Impacto del Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico», realizado por la consultora AFRY Management para la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica (aelec) y que se ha presentado este jueves.

El impacto particular de la aplicación del FNSSE en cada hogar «dependerá del peso de los distintos combustibles en su cesta energética», matiza el estudio, que explica que en aquellos con una mayor presencia de la electricidad, como es el caso de los consumidores vulnerables o aquellos que decidan electrificarse, se proyecta una reducción neta de su factura energética.

En ese sentido, las previsiones de la consultora apuntan a un aumento del ahorro en los hogares que hayan electrificado sus consumos de en torno a 291 euros anuales, así como un ahorro de 1.368 euros al año frente a un consumidor doméstico no electrificado.

Otra de las conclusiones señala que una mayor electrificación de la economía debido a la implementación del FNSSE traerá consigo «una serie de beneficios macroeconómicos adicionales».

Entre ellos figura una mayor renta disponible en los hogares, una mejora de la balanza comercial debido al menor consumo energético de las alternativas fósiles y una mayor inversión en vehículos eléctricos e infraestructura, bombas de calor y energía renovable, incrementando en 147.000 vehículos eléctricos y 78.000 bombas de calor en 2030, respecto un escenario tendencial.

La consultora estima que estas medidas podrían resultar en un incremento adicional del PIB de 1.433 millones de euros en el periodo 2021-2030, generando mayor valor añadido y 16.370 empleos anuales más hasta el año 2030.

«El FNSSE es un paso en la buena dirección para asegurarnos el cumplimiento de los objetivos a 2030 al repartir el coste de la descarbonización entre todas las energías, adelantar una reforma fiscal medioambiental bajo el principio de que quien contamina paga y proporcionar señales más adecuadas para la electrificación y descarbonización de la economía», ha valorado el director de Regulación de aelec, Pedro González, durante la presentación del informe.

Pese al «impacto positivo» del FNSSE en la economía y en el medioambiente, es conveniente desarrollar mecanismos adicionales que mitiguen las potenciales consecuencias negativas sobre la industria, y «cuyos costes no se prevén elevados», advierten los analistas a cargo del informe.

Asimismo, señalan que en un entorno de precios e ingresos por subastas de CO2 previsiblemente altos, se podrían destinar una parte de estos mayores ingresos para ampliar las compensaciones previstas y «sin necesidad de modificar la contribución al Fondo del resto de sectores».

En ese sentido, a finales del pasado mayo GasIndustrial manifestó su inquietud en torno a que el FNSSE podría encarecer aún más los costes de la industria española, «ahondando en la desventaja competitiva con sus homólogos europeos».

En un comunicado, la asociación que agrupa a los grandes consumidores industriales de gas advirtió así de que el riesgo de deslocalización de las fábricas de España hacia países más competitivos en coste de gas «será evidentemente mayor».

El Proyecto de Ley para la creación del FNSSE está en tramitación y tiene como objetivo la creación de un nuevo fondo que financiará los costes históricos del régimen retributivo específico de renovables, cogeneración y residuos, que incluyen los incentivos de las energías renovables, redistribuyendo este coste entre todos los vectores energéticos.