La leche es un alimento que tomamos desde nuestro nacimiento, pero mucha gente la destierra de su alimentación basándose en que no es tan buena para la salud como se piensa. En cambio, otros la eliminan por su proveniencia animal para decantarse por otros tipos de bebidas vegetales como la mal llamada «leche» de soja o avena.
Lo cierto es que el organismo nota el consumo habitual de lácteos, ya que es una gran fuente de calcio. A continuación, te mostramos qué le pasa a tu cuerpo si tomas un vaso de leche todos los días.
10NO TOMES LECHE SIN LACTOSA SI NO ERES INTOLERANTE
Si no eres intolerante a la lactosa, no tienes por qué tomar este tipo de leche, ya que estás renunciando a muchos nutrientes propios de ella. Por ejemplo, al organismo le cuesta más absorber el calcio sin lactosa. Además, tu cuerpo se puede acostumbrar a ese tipo de leche y reaccionar de una manera parecida a la de un intolerante cuando vuelvas a tomar leche normal. Es el mismo caso de una persona que no es celíaca y que renuncia a tomar alimentos con gluten.
