En la actualidad, nadie duda de las cualidades de Novak Djokovic. Tanto es así que el mismo jugador serbio ha justificado su supremacía en el deporte blanco al ostentar actualmente el número 1 en el ranking de la ATP además de haber roto el récord de Roger Federer y convertirse en el tenista que más semanas ha estado en ese puesto tan privilegiado, tras superar las 310 semanas que había acumulado el suizo. La verdad es que el balcánico acumula muchos registros para luchar frente a frente tanto con Federer y Nadal para convertirse en el mejor de la historia.
Aunque ni el helvético ni el español han expresado nunca que quieren alcanzar ese título del mejor de todos los tiempos, eso es un hecho más que obvio y Djokovic si que ha declarado que ese es su objetivo; al punto de que ya tiene un plan para eso. Con la vista puesta en esa meta, el serbio tiene la calidad y el talento para luchar por eso; sin embargo, no todo ha sido tan positivo en su carrera, pues las polémicas y otros escándalos lo han perseguido. Sus enfados en cancha, alguna que otra declaración fuera de lugar o el hecho de que algunas veces alegue tener lesiones, siga jugando y además haga un partidazo, lo cual confunde y molesta a otros tenistas; todas esas son cosas menores comparadas con algunos casos en los que Djokovic ha sido noticia por cosas algo alejadas del tenis.
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Djokovic no celebró su victoria en Wimblendon 2018
Tras obtener el trofeo como campeón de Wimbledon 2018, el tenista serbio no pudo celebrar con toda la algarabía que requería tal gesta; esto debido a que en su familia se vivieron momentos de tensión por el secuestro que sufrió el abuelo de su esposa, Jelena Djokovic. El anciano de 85 años fue secuestrado por maleantes que entraron a su vivienda en horas de la madrugada y se lo llevaron; el problema es que al ser familiar del tenista número 1 de la ATP, estos pidieron un rescato de dos millones de euros.
Horas después, gracias a la intervención de la policía, el señor Miloslav Radisavljevic quedó en libertad tras ser amarrado a un poste a varios kilómetros de su casa en la ciudad de Ljig. El rescate nunca se pagó, pero los secuestradores robaron el teléfono del anciano y 220 euros que tenía este. Radisavljevic no sufrió ninguna herida grave, aunque el susto fue tremendo para toda la familia que vivió muchas horas de angustia; de hecho, el equipo de prensa de Djokovic explicó en un comunicado que todos están «en completo estado de shock por lo sucedido».
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Un torneo para el olvido
La pandemia del coronavirus conmocionó al mundo entero en el 2020. Desde el mes de marzo de ese año, incluso en algunos países todo inició en febrero, el mundo entero quedó en un confinamiento total; el planeta se paralizó en todos los sentidos y las cosas no pintaban nada bien para el deporte en general. Torneos o campeonatos quedaban suspendidos y eventos de gran magnitud, como los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 o la Eurocopa 2020, tuvieron que postergarse; algunos no se lo tomaron con la seriedad que el caso requería y en ese grupo estuvo metido Novak Djokovic.
Al serbio no se le ocurrió hacer nada mejor que hacer, cuando la pandemia estaba en su punto más álgido y con las muertes arreciando en Europa, que organizar un torneo benéfico que estaría abierto a todo el público: el Adria Tour. Sin medidas de seguridad sanitaria, sin distanciamiento social en el público y con el apoyo de tenista importantes como Thiem, Zverev o Dmitrov se llevó a cabo este despropósito de evento. La imprudencia reinó en todo momento y ese torneo para «unir y alegar al público» no fue más que un nido para contagiar a todos.
Esa tendencia de que creerse superiores que los demás quedó escenificada con partidos de fútbol de baloncesto y hasta una fiesta multitudinaria en la que no hubo distanciamiento ni ninguna medida y hasta se vio bailar a Djokovic sin camisa. En los partidos, además, se les veía celebrar abrazándose y hasta tomándose fotos con el público. El resultado fue un montón de contagios, incluidos el propio Djokovic y su esposa, y un bochorno total para el tenis.
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Ese golpe le costó muy caro a Djokovic
El 2020 trajo otra polémica para el número 1 del ranking ATP, nada más y nada menos que un escenario tan importante como el Abierto de Estados Unidos. Tras un burbuja de seguridad, mucha seguridad y todas las medidas sanitarias necesarias, el Grand Slam norteamericano pudo llevarse a cabo; allí Djokovic llegaba como amplio favorito, más aún al no estar ni Federer ni Nadal. Además de eso, el estado de forma del balcánico era sorprendente pues llegaba completamente invicto al torneo.
Todo iba bien para Djokovic hasta que llegó el partido de octavos de final contra Pablo Carreño. Luego de perder la oportunidad de llevarse el primer set, el español consiguió un tiro ganador para igualar las cosas (5-5) y con el que se lastimó el hombro el balcánico; pero todo se rompió tras ser atendido «Nole», pues perdió su saque y con 6-5 a favor del gijonés, al que además le tocaba sacar, Djokovic pegó un fuerte pelotazo sin ver y este le terminó pegando a una juez de linea. El juez principal solo meditó un poco y lo descalificó por ese golpe; así que el serbio saldría sin el título, que le permitiría recortar distancia con Nadal y Federer en el palmarés de Grand Slams, sin el invicto, sin dinero de premio, sin puntos para el ranking ATP y con una gran multa. Otro escándalo a su lista.
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Toda una trama para desprestigiar al serbio
Para Djokovic las cosas no han sido nada fáciles en los últimos tiempos. Después de ganar el Abierto de Australia, con la polémica de de la lesión que desconcertaba a sus rivales, el serbio ha visto como su nombre ha vuelto a ser noticia y esta vez por un asunto que nada tiene que ver con el tenis; pero que lo hubiera dejado muy mal parado ante el público en general. La modelo Natalija Scekic reveló que le prepusieron 60.000 euros y un viaje a donde quisiera para que sedujera a Djokovic, grabará un vídeo sexual con él y que luego pudieran utilizar esa cinta para extorsionarlo.
«Pensé que me estaban haciendo una cámara oculta a mí cuando ese señor, al que tomaba por alguien serio, me propuso el plan. Naturalmente, la idea era usar ese vídeo para hacerle chantaje. Me reí y pregunté si era una broma. No lo era y me sentí muy ofendida, así que cogí mis cosas y me largué«, explicó Scekic a la revista ‘Svet & Scandal’. Ella quiso contar la historia para alertar a Djokovic, pues podrían tratar de usar a otra persona para llevar a cabo el plan. Además, la modelo lo considera como un héroe nacional y más que nada «un hombre de familia»; por lo que no quería ni desprestigiarlo ni romper un hogar feliz. Desde ahora el serbio deberá cuidarse debido a que las polémicas parece que siempre lo persiguen.
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