Tu cuerpo es bastante sabio, y en ocasiones, te manda señales para que sepas lo que le sucede. El ejemplo más claro es un bostezo, pero, si te fijas bien, puedes llegar a detectar cuando tienes una deficiencia de hierro.
El hierro es un mineral muy importante para el funcionamiento correcto de tu cuerpo. Entre sus múltiples funciones destacan la de ayudar con la formación de proteínas y musculares y la de la producción de hemoglobina.
Por lo cual, la deficiencia de este mineral causa un nivel bajo de glóbulos rojos o hemoglobina. Esto hace que los músculos y tejidos no reciban la cantidad de oxigeno necesaria por lo cual, no trabajan con el mismo rendimiento.
7Causas de la anemia ferropénica en el organismo
La deficiencia de hierro puede ser originada por el poco consumo de este mineral o la incapacidad del cuerpo para absorberlo por el mismo. Esta deficiencia va a manifestarse en una anemia ferropénica.
Puedes perder sangre por diferentes razones como un sangrado gastrointestinal, o la pérdida de sangre lenta y continua de sangre dentro del cuerpo. Por otra parte, las mujeres con menstruaciones intensas podrían padecer esta anemia o por la gran cantidad de pérdida de sangre durante ese periodo.
El hierro que consumes a través de los alimentos es absorbido por tu intestino delgado y se traslada al torrente sanguíneo. En oportunidades, pueden existir trastornos intestinales que afecten la capacidad del intestino para absorber los nutrientes de los alimentos que consumes.
