El Real Madrid ha aplicado en los últimos años una política de fichajes de muchos jóvenes con esperanza de que despunten en un futuro en el primer equipo. Florentino Pérez, al ser un visionario como nadie, apuesta por estos jóvenes y los ficha a un precio que es aún asumible antes de que se conviertan en estrellas inalcanzables. Con ese método llegaron futbolistas como Vinicius, Rodrygo, Valverde, Odegaard, entre otros; pero sin duda uno de los que más esperanzas genera al madridismo es Takefusa Kubo.
Al ver las pocas oportunidades que tendría en el primer equipo blanco y para que no pierda tiempo en su progresión, los merengues tuvieron el acierto de cederlo al Mallorca la temporada pasada y en esta volvieron a aplicar la misma fórmula, solo que está vez fue a un equipo un escalón por encima: el Villarreal. Con el «Submarino Amarillo» tiene la oportunidad de jugar en Europa; no obstante, lo que todo el mundo pensaba que fue una buena elección, ahora se cuestiona al no tener tantos minutos como se esperaba. Unai Emery ha sido la piedra de tranca, pero el japonés no se rinde y poco a poco quiere demostrar de lo que está hecho y ante el Sivasspor ya dio prueba de eso.
Buenas actuaciones a pesar de todo
Si bien hay muchas esperanzas puestas por parte del Madrid a la cesión de Kubo al Villarreal, más que justificadas al ver como se comió al Sivasspor; lo cierto es que en este inicio de Liga ha tenido muy pocas posibilidades de demostrar todo el talento que tiene, más que nada por la falta de minutos. Sin embargo, eso no le ha impedido marcar diferencias cada vez que entra al campo.
Kubo ha estado convocado a las seis jornadas que van en esta temporada en España y aunque ha entrado al campo en todos, la cantidad de minutos ha sido muy pobre para lo que se esperaba. En total solo ha jugado 80 minutos en seis encuentros; pero en lugar de afligirse el japonés ha salido a comerse al rival en los pocos instantes que le dan. Frente al Barcelona dejó detalles, contra el Atlético y Valencia entró muy bien, por ejemplo, por eso se entiende cada vez menos su suplencia.
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El Mallorca disfrutó de Kubo
La experiencia de Kubo en este inicio con el Villarreal contrasta mucho con lo que vivió en su llegada al Mallorca. En el conjunto balear tardó un poco en hacerse un hueco en el 11 titular, pero cuando se instaló en el equipo fue pieza clave en todos los esquemas. Rápidamente probó las razones por las que el Madrid apostó fuerte por él y también por las que el conjunto isleño decidió tomarlo prestado por una campaña.
Gracias al desparpajo, la calidad y el buen juego que mostró se convirtió muy pronto en una de las sensaciones del campeonato. Aunque el Mallorca sufrió mucho en la parte baja de la tabla sus jugadas movimientos, pases y goles fueron vitales para que los bermellones soñaran con la permanencia. Si bien al final el objetivo de quedarse en Primera no se logró, su pasó por allá se recuerda con cariño y al ser tan bueno fue lo que hizo que el Villarreal lo quisiera para esta campaña, solo que Emery parece no comparte la misma opinión.
